La comunidad universitaria de la UAL ha dado un magnífico ejemplo de participación y democracia en las elecciones al Rectorado de este 10 de marzo. Su alto nivel de compromiso ha quedado patente en la apuesta a lo largo de este último año por un proyecto de cambio y que finalmente se ha visto reflejado en las urnas.
Me siento gratamente satisfecho por el gran respaldo que he recibido en estas elecciones. Agradezco sinceramente el apoyo de los estudiantes, del personal de administración y servicios, y de los docentes e investigadores que han elegido un nuevo modelo de gobierno y de gestión para la UAL, y han confiado en mí para liderarlo. El respaldo recibido me motiva aún más para guiar una nueva etapa en la Universidad de Almería en la que, como nuevo Rector, me comprometo a gobernarla desde la participación y la transparencia, la independencia y la pluralidad.
Mi principal reto como Rector es conseguir que los estudiantes se sientan orgullosos de estudiar en la Universidad de Almería por su nivel de compromiso hacia ellos y por su reconocimiento académico y social; que nuestros docentes y profesionales de la administración se sientan motivados para contribuir con entusiasmo a su formación, como profesionales y como ciudadanos. Una de las principales fortalezas de la UAL son las capacidades de nuestros profesionales, tanto a nivel de administración y servicios, como de docencia e investigación. Por eso, debemos de cuidar esta riqueza profesional y humana, y proporcionarles los medios para que den lo mejor de sí, y se reconozca el mérito y el trabajo.
En la Universidad de Almería, como todas las universidades, tenemos la necesidad de una mayor financiación, por eso es necesario una gestión eficiente y transparente, y en cuya toma de decisiones participen todos los miembros de la comunidad universitaria y se sientan implicados. Como nuevo Rector activaré todos los mecanismos de participación que he propuesto en mis compromisos de gobierno creando comisiones delegadas y de asesoramiento del Consejo de Gobierno, grupos de coordinación de procesos de gestión, ponencias encargadas de proponer reformas y elaboración de reglamentos.
Hay temas que van a requerir grandes acuerdos, como la reforma de estatutos o el propio reglamento electoral, la planificación estratégica a medio y largo plazo, un plan de reorganización de los recursos humanos y de reestructuración de servicios, un documento de plantilla teórica del PDI o una nueva normativa de ordenación docente. Por eso es tan importante el voto de confianza que he recibido: la motivación y complicidad de la comunidad universitaria me hace ser optimista para que estos proyectos lleguen a buen puerto.
Espero que toda la comunidad universitaria se sienta implicada en esta nueva etapa que hoy comienza, y una vez que ha acabado el proceso electoral, me gustaría insistir que todas las personas tendrán las puertas abiertas para que puedan aportar y colaborar en pos de lograr una UAL más competitiva.
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