El ecohuerto del campus de la UJA otorga su primera cosecha al comedor social ‘La Olla comunitaria’, situado en un local del Polígono del Valle. El director de Secretariado de Responsabilidad Social, Cooperación y Deportes de la Universidad de Jaén, Arturo Montejo, hizo entrega, el pasado viernes, de la producción cultivada en estos meses a los servicios sociales de este comedor con el objeto de fomentar la solidaridad con los sectores desfavorecidos.
Se trata del primer ecohuerto de Las Lagunillas, una experiencia piloto que comenzó el pasado mes de octubre, coordinada por el Aula verde de la UJA, con el objetivo de mejorar el conocimiento ambiental en la comunidad universitaria, así como de fomentar actitudes más responsables con la naturaleza. Esta actividad, en la que participan más de 40 estudiantes, PAS y PDI de la universidad jiennense, aspira también a promover el conocimiento sobre agricultura ecológica, compostaje, suelos, siembra, remedios para el control biológico… Arturo Montejo subrayó en este sentido que el objetivo del huerto no es en sí la producción de alimentos, “sino la formación y la sensibilización en temas como la sostenibilidad ambiental, la producción ecológica, la alimentación saludable, el voluntariado, el cambio climático o la biodiversidad”.
Primera cosecha en el ecohuerto de la UJA
Este huerto está habilitado a espaldas del edificio de Rectorado, junto al aparcamiento, ocupa 100 metros cuadrados y está dividido en cuatro parcelas de 6×4 metros cada una, además, incluye una caseta de herramientas y una compostera. Las verduras y hortalizas producidas en este espacio se destinarán a diversos comedores sociales de la ciudad, y a la ejecución de talleres de alimentación saludable para que los participantes puedan probar los alimentos cultivados. La primera cosecha del ecohuerto jiennense ha estado constituida principalmente por espinacas.
Esta actividad está integrada dentro de un módulo de un curso de extensión universitaria y está reconocida con un crédito de Libre Configuración. Para ello contempla la organización de siete talleres formativos a lo largo del curso , además de incluir diversas sesiones, jornadas informativas, charlas, conferencias y encuentros para tratar sobre temas ambientales. “El suelo es el gran olvidado en los sistemas de agricultura tradicional”, explica Gema Siles, Bióloga, Educadora Ambiental especializada en Producción Ecológica y Sostenibilidad, y una de las responsables de la coordinación de estos talleres. Siles detalla, en este sentido, que cuidar y proteger el suelo para que mantenga una actividad biológica saludable y sostenible es esencial a la hora de poner en marcha cualquier actividad agraria, y destaca la gran participación y el interés que están cosechando estas actividades entre los participantes.
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