El encuentro entre el BeSoccer CD UMA Antequera y el Barcelona B sacó partido a cada segundo. A falta de un poco más de 30 segundos del final, Povill igualó el marcador y rompió una ventaja local de 2-0. Un golpe durísimo que no acabó con el espíritu ganador del BeSoccer CD UMA Antequera. La gestión de los últimos instantes fue excelente. Con la presión y el enfado de haber dejado escapar un resultado favorable, Alvarito salió con la camiseta de portero-jugador para ejecutar el ataque de cinco y disponer, al menos, de una ocasión. Y está se creó con una precisión excelsa. El 17 trazó un potente pase al palo y entró Nando para empujar el balón al fondo de las mallas a escasos cuatro segundos del sonido de la bocina (3-2). La pista se inundó de la alegría que desprendieron tanto jugadores como aficionados. Estos primeros pudieron recompensar ese aliento y apoyo que percibieron desde la grada para luchar con ahínco hasta en los escenarios más complejos.
Conejo contribuyó al crecimiento de sus compañeros en el 40×20 gracias a una serie de paradas de mucho nivel. El portero natural de Coín tuvo una de esas tardes de inspiración bajo palos en las que se transformó en un muro infranqueable. Por más disparos que recibía, sus reacciones eran todavía mejores. Hubo que esperar al minuto 15 del primer tiempo para la inauguración del electrónico. Raúl Canto puso la pelota en juego desde el córner y Alvarito regaló a los seguidores del plantel verde una definición mágica (1-0). El 17 superó al guardameta rival por medio de una volea ajustada al palo. Un disparo asombroso, nada fácil de ejecutar, que rompió la igualdad que aún imperaba en el duelo. El 1-0 otorgó más confianza a los anfitriones y las ofensivas no cesaron. Javi Amorós se topó con Óscar de la Faya tras beneficiarse de una dejada de espaldas de Nando. El pívot fijó a la zaga y el cierre alicantino se incorporó con velocidad desde atrás.
Álex Fuentes, con los malagueños volcados al ataque, encontró el escenario de partido más adecuado para mostrar todo su talento. El ala madrileño, en el minuto 17, realizó una de sus jugadas individuales más espectaculares. Avanzó desde su propio campo con decisión dejando atrás a los defensores que salieron a su paso para arrebatarle el balón. Nadie logró quitárselo y esperó el momento adecuado para enviar un pase medido al segundo palo. Ahí ya se encontraba Jesús Sepúlveda para finalizar con éxito la acción (2-0). El joven jugador, aún en edad juvenil, devolvió la confianza del cuerpo técnico con su primer tanto en Segunda División.
En el desenlace del encuentro, Jesús y Óscar perdonaron la tercera diana y, a falta de tres minutos, David Peña recortó distancias en el luminoso con un zurdazo que rozó en Alvarito antes de alojarse en la portería (2-1). Xavier Closas arriesgó con el ataque de cinco con Povill luciendo la camiseta de portero-jugador. El cuadro del BeSoccer CD UMA Antequera aguantó en defensa e incluso Álex Fuentes tuvo un disparo a puerta vacía. El cuero se marchó muy cerca del palo. La insistencia del filial del Barça les valió para silenciar el fortín de su oponente a poco más de 30 segundos. Povill sorprendió a Conejo con un derechazo exterior muy potente (2-2). El empate parecía ya el resultado definitivo al no tener Moli la posibilidad de pedir tiempo muerto y preparar los últimos lances del envite. La reacción del banquillo local fue rapidísima para al menos disponer de una opción clara de tiro.
Alvarito se puso la elástica de portero-jugador y ordenó a sus compañeros para ejecutar el ataque de cinco. Empezó una paciente circulación del balón con la intención de mover a la defensa blaugrana hasta que el autor del primer gol decidió dar un pase cercano al poste. Nando vio la asistencia y entró con fuerza para firmar un valioso triunfo ‘in extremis’ (3-2). Solo quedaron cuatro segundos para el final que ya no separaron al BeSoccer CD UMA Antequera de la consecución de los tres puntos. La próxima jornada rendirá visita a la complicada pista del Software DELSOL Mengíbar el viernes 28 de febrero, a las 18.30 horas, antes del parón en la competición por la celebración en Málaga de la Copa de España.