La mejora de las técnicas de cultivo y la búsqueda de herramientas que hagan más sostenible la agricultura es uno de los grandes retos que plantea el cambio climático. La profesora de la Universidad de Málaga Sonia Osorio liderará durante los próximos cuatro años el proyecto Goodberry, un consorcio de 19 grupos de investigación y empresas de 10 países, que tendrá el reto de buscar nuevas herramientas para la mejor sostenibilidad de cultivos de frutos de baya ante el cambio climático. Se trata de una convocatoria europea del programa marco Horizonte 2020, dotado con una financiación de 4,9 millones de euros.

“Lo que buscamos son nuevas herramientas biotecnológicas para mejorar el sabor y el aroma tanto de fresas, como de frambuesas y grosellas negras, así como aumentar la calidad de la postcosecha, es decir, la duración del fruto en venta tras su recolección”, explica la profesora. Osorio explica que aunque es un trabajo coordinado por investigadores, involucra desde agricultores hasta empresas comercializadoras. “Con esta triada lo que se pretende es que el conocimiento no quede en el laboratorio, sino que se transfiera y aplique”, aclara.