Una de las acciones que quiere seguir acometiendo el nuevo equipo de gobierno de la Universidad de Málaga es la continuidad del Plan de Ordenación de los Recursos Humanos del Personal de Administración y Servicios (Porhuma).
De este modo, al inicio de 2017, el rector de la Universidad de Málaga, José Ángel Narváez; la gerente, María Jesús Morales, el presidente del comité de empresa, el presidente de la Junta de PAS y los representantes de los sindicatos SITUMA, CSIF, CGT y UGT firmaron un documento que debía ser aprobado por el Consejo de Gobierno para entrar en vigor el 1 de febrero de 2017.
A pesar de los intentos de ambas partes para llegar a un acuerdo, el sindicato CCOO no ha respaldado con su firma el documento. Porhuma es un plan cuatrienal, por lo que tendrá vigencia hasta el año 2020 y contiene la relación de puestos de trabajo de la plantilla del PAS, además de un catálogo de funciones de los servicios, un reglamento de provisión para funcionarios y laborales, así como las normas de aplicación y una memoria económica para que pueda ser llevado a cabo a lo largo de su periodo de vigencia.
Entre otras cosas, su contenido incluye un proceso de funcionarización para el personal laboral -que ya ha emprendido el Servicio de Bibliotecas-, así como un diseño de la carrera profesional de los trabajadores.
Negociaciones
Las diversas negociaciones para alcanzar un acuerdo entre la institución universitaria y los diferentes sindicatos se han sucedido desde el pasado mes de septiembre. El proceso concluyó en enero de este año, tras la ratificación del documento, y sin llegar a un consenso con Comisiones Obreras, cuyo portavoz del Grupo Claustral PAS CCOO, Javier Ballesteros, insistió en el pasado Claustro sobre que “este plan está a punto de culminar y esperamos que para el año que viene se expanda al resto de personal laboral ya que los trabajadores hacemos grande a la universidad”.
Aún así, no se ha llegado a ningún acuerdo con este sindicato que basa su disconformidad, sobre todo, “en el área del teletrabajo”, según informó José Ángel Narváez, quien tendió la mano para sentarse en futuras negociaciones ya que entiende “fundamental” el acuerdo con los sectores sindicales en cuanto a los trabajadores se refiere.
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