El curso académico ha arrancado oficialmente en las Universidades Públicas de Andalucía. De la mano de la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, junto a la consejera de Conocimiento, Investigación y Universidades, Lina Gálvez, se celebró ayer el Acto Oficial de Apertura en la Universidad de Cádiz.
Cada año, las nueve Universidades Públicas Andaluzas se van rotando para acoger este acto, siendo Cádiz la elegida para dar inicio al curso 2018/2019. Se trata del último acto dirigido por el rector Eduardo González Mazo, quien dejará el cargo el próximo mes de mayo tras ejercer el cargo durante los últimos ocho años. Mazo aprovechó así la ocasión para agradecer a toda la comunidad gaditana su apoyo y trabajo en estos años, destacando la labor ejemplar de cada servicio y “el compromiso social de ser útiles” que tiene la universidad.
El lugar elegido para iniciar el curso académico ha sido la Escuela Superior de Ingeniería de la Universidad de Cádiz, cuyo Salón de Actos se vio bastante limitado ante la gran asistencia de público. La presencia de múltiples autoridades académicas y políticas, sumadas a los premiados por su excelencia en Grados y Máster, llevó a la retransmisión del acto en varias salas paralelas. Entre los presentes destacaban representantes de diversos partidos políticos, dando muestra del compromiso que el Parlamento andaluz tiene con su sistema universitario.
Una universidad que garantiza la igualdad
Siguiendo el protocolo, la comitiva de doctores, catedráticos y cargos académicos hizo su entrada de forma puntual acompañada por el Coro de la Universidad de Cádiz. Tras su entrada se constituyó el Claustro del nuevo curso, tras lo cual la secretaria General de la UCA, Francisca Fuentes, presentó la Memoria Académica del curso con los datos más relevantes. Ayudada por una serie de diapositivas se presentaron los más de 21.000 estudiantes que el curso pasado llenaron las aulas gaditanas, repartidos entre los 44 títulos de grados, 18 dobles grados, 50 másteres y 17 programas de doctorado. De forma concisa y sin entrar en los cientos de detalles que componen la Memoria Académica universitaria, Fuentes hizo el repaso debido a las cifras y datos oficiales, evitando así que se sobrecargara el acto de forma tediosa.
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La lección inaugural de este año versó sobre la importancia de la psicofarmacología y los referentes de este campo de estudio en la Universidad de Cádiz. De la mano del catedrático de Farmacología de la UCA, Juan Antonio Micó, se presentaron los principales hitos históricos, sumando su recorrido personal en la investigación así como la aclaración de los conceptos clave. Tras la que es primera lección magistral del curso académico, González Mazo tomó la palabra en el que sería su último discurso de apertura la frente de la institución gaditana.
Durante casi media hora, Mazo quiso agradecer a todos los que han ayudado a hacer de la Universidad de Cádiz una institución “útil para la sociedad”, remarcando la importancia de servir a la ciudadanía manteniendo la transparencia en todo momento. En esta línea, el rector gaditano expuso la necesidad de “garantizar las medidas de igualdad de oportunidades” como base de una sociedad basada en el progreso y competitiva. En cuanto a la relación de las universidades con la Junta de Andalucía, Mazo también tuvo palabras para los dos consejeros que en los últimos años han cubierto el área de educación superior señalando que “nunca hemos perdido a un consejero sino que hemos ganado dos”. Dos figuras que han significado “la reducción de la deuda de la Junta de Andalucía con las universidades”, quedando esta en unos 200 millones de euros “que esperamos se resuelvan pronto”.
Financiación universitaria
La financiación ha sido tema clave tanto en el discurso de apertura del curso académico del rector como en el posteriormente pronunciado por la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz. Así, Mazo señaló que la “financiación no debe ser un tema de supervivencia”, mientras que Díaz, recalcó como las medidas que se han llevado a cabo “no afectarán a la financiación universitaria”. El discurso de la presidenta estuvo basado en la enumeración de las medidas que desde su Gobierno se han llevado a cabo para garantizar la igualdad de oportunidades y el acceso a la Educación Superior, subrayando el último convenio para incentivar la carrera docente en el área de Medicina a través del programa María Castellano.
Díaz expuso ante los presentes el compromiso por construir una “universidad abierta y comprometida”, donde no solo se entienda la institución por su función de ascensor social sino que a la vez se contribuya a “formar a una sociedad crítica en busca de la excelencia”. Ante los datos de bonificación de las matrículas, Díaz señaló que el curso pasado fueron unos 92.000 andaluces los beneficiados, a los que este año se sumarán los estudiantes de la UNED y de los Centros adscritos. Una medida que “no afectará a la economía universitaria” para lo cual se transferirán 37,8 millones de euros de forma independiente al resto de la financiación.
Asimismo, entre los compromisos señalados por la Junta de Andalucía, la presidenta señaló que se permitiría disponer a las instituciones del remanente, dando libertad para su uso. Una libertad económica que se unirá al modelo de financiación en el que actualmente están trabajando el consejero de Economía y Hacienda, Ramírez de Arellano, junto a la consejera de Conocimiento, Investigación y Universidades, Lina Gálvez para “hacer compatibles las realidades de cada universidad con la búsqueda de la excelencia.
Finalmente, Susana Díaz expuso el compromiso de cumplir el acuerdo con los sindicatos para trabajar en la evaluación de los complementos retributivos de los docentes así. como en la carrera horizontal del PAS. Un discurso con vistas al futuro donde Díaz señaló la importancia de “ser capaces de poner las luces largas y dar las oportunidades que se merecen”, haciendo de Andalucía una región del conocimiento y proyección social a través del sistema universitario.
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