Más de 40 alumnos de diferentes perfiles y titulaciones participan desde hace cerca de dos meses en el Aula de Debate de la Universidad de Jaén. El objetivo de la misma es capacitar a sus participantes para argumentar y razonar sobre cualquier tema, y aprender a exponer sus ideas de manera ordenada y efectiva ante un público. El catedrático de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales y profesor de Oratoria Moderna, Juan Manuel de Faramiñán, es el coordinador del aula, y explica que “este proyecto nació del interés de la vicerrectora de Estudiantes, Mª Luisa del Moral, por crear un espacio de debate en el campus, ella tuvo la idea original y puso todos los medios para hacerlo posible”.
Los alumnos que conforman el aula se reúnen dos veces por semana, los martes a las 11:30h y los miércoles a las 18:30h, para afilar sus habilidades para la oración y entrenar su razonamiento argumentativo. En este sentido, el proyecto cuenta con la colaboración de la profesora de Psicología Social, Pilar Berrios, que enseña a estos estudiantes a controlar sus emociones y a luchar contra el miedo escénico, y con la del ex alumno de la UJA Alejandro Molina, quien enseña las principales técnicas para debatir y argumentar. Además, los también ex alumnos Borja Pareja y María Cumbreras participan en tareas relacionadas con la organización del grupo.
Aula de Debate: una actividad intelectual y social
“Este punto de encuentro te da la oportunidad de mejorar tanto a nivel intelectual como personal, conoces a mucha gente y tienes la oportunidad de apuntarte a torneos de debate fuera de la universidad”, subraya Alejandro Molina. Así, el grupo de la UJA ha participado hasta la fecha y participará durante este mes en el Torneo Académico Pasarela de Córdoba, en el Torneo Rector de la Universidad de Málaga, o en el Torneo Cánovas también en Málaga, entre otros. De cara al próximo cuatrimestre el equipo jiennense aspira participar en la simulación del Parlamento Andaluz y en otros encuentros nacionales. Molina recuerda, por otra parte, que el grupo tiene las puertas abiertas para cualquier estudiante que quiera sumarse.
“El Aula de debate es una manera de preparar al alumnado para la vida profesional, no sólo es interesante que aprendan a hablar en el mundo universitario, sino que estas habilidades son muy necesarias para enfrentarse al mundo laboral”, concluye Faramiñán, quien además de coordinar el Aula se encarga de enseñar las principales técnicas de la oratoria moderna.
Claves y técnicas para ser un buen orador
Claves y técnicas para ser un buen oradorJuan Manuel de Faramiñán, quien lleva más de ocho año impartiendo clases sobre oratoria moderna en la Universidad de Jaén, explica para este periódico que en su opinión son tres las claves esenciales para ser un buen orador:
Dominar el escenario. “Cuando subes al escenario y te encuentras ante un auditorio silencioso que te está mirando estás solo ante el peligro y tienes que saber dominar esta situación, saber gesticular adecuadamente y dominar tu expresión corporal”, explica Faramiñán en este punto. Pensar en orden. “La oratoria no sólo nos enseña a hablar, sobre todo nos enseña a pensar”, aclara el experto, quien recalca que “cuando aprendes a pensar, amueblas adecuadamente tu cabeza y puedes elaborar conceptos complejos y desarrollarlos de una manera clara y ordenada para un público”. Y empatizar con el público. En este apartado el profesor asegura que es imprescindible saber captar la atención del auditorio y mantener su interés sobre lo que se le está diciendo.
Igualmente, y según indica Framiñán, hay diversas técnicas que pueden ayudar a conseguir estas estrategias, como por ejemplo aprender a sintetizar. “Es muy frecuente que cuando alguien empieza a hablar no sabe cómo terminar”, señala. De esta manera aprender a realizar esquemas mentales y a simplificar ideas complejas es imprescindible para tener claro lo que se quiere decir sin perderse durante el proceso y, sobre todo, sin aburrir o confundir al auditorio. Otra técnica es aprender a ordenar lo que se quiere decir. “Esto consiste básicamente en estructurar el discurso en un ‘prólogo’ breve, un ‘logos’ mucho más desarrollado y un ‘epílogo’ también corto”, añade. La mirada es otro de los aspectos importantes para ser un buen orador. El profesor de la UJA destaca que la clave está en mirar a los ojos, en evitar mirar al techo o a la pared y en su lugar recorrer, con los ojos, las miradas de las distintas personas que forman parte del público, sin concentrarse únicamente en una de ellas.
Compartir