El pasado jueves, 30 de marzo de 2017, se celebró en el Paraninfo del Campus de El Ejido la investidura de nuevos doctores por la Universidad de Málaga. Allí estaba Norberto Domínguez, doctor en Ciencias de la Educación y Maestro de Educación Física en la escuela pública andaluza, más conocido entre sus compañeros como «El de Baloncodo».
Seguro que lo último que imaginaba Norberto (el creador) es que su Tesis Doctoral provocaría que gente de media España practicase deporte de forma diferente a lo habitual. Baloncodo surge fruto de ese estudio, y crece cada día gracias al «boca a boca» y a su permanente presencia en las redes sociales.
Para conocer en qué consiste su deporte y presentar cómo una Tesis Doctoral puede cambiar de forma directa la percepción de un deporte y su práctica, hemos entrevistado a Norberto.
Maestro en activo de Primaria en la pública y Doctor en Ciencias de la Educación. También es Licenciado en Pedagogía, Licenciado en Pedagogía y Doble Máster Oficial. ¿Es necesaria una mayor formación entre el profesorado en nuestro país?
Bueno, siempre digo que mejor que sobre que no que falte (risas). Es cierto que tenemos entre manos la mayor de la responsabilidades: estamos formando al futuro de nuestro futuro. Nuestra materia primaria son personas en construcción, y cuanto más formados estemos por supuesto que mejores serán nuestras actuaciones dentro y fuera del aula.
En noviembre de 2015 defiende su Tesis Doctoral, en donde surge Baloncodo. Uno de sus directores viaja a Costa Rica y comienza todo. ¿Qué ha supuesto Baloncodo en los últimos meses?
Baloncodo es un verdadero regalo. Lo último que imaginábamos Pedro, Jose o yo (Pedro Montiel y Jose Chinchilla, directores de la Tesis Doctoral de Norberto) es que esta disciplina deportiva tendría tanta repercusión. Es cierto que aún está en «pañales» y que queda muchísimo por hacer, pero la mayoría de las personas con las que coincidimos nos remiten a la cantidad de cosas que hemos alcanzado en tan poco tiempo. Una vez que acabo la Tesis, Jose me propone presentarlo en el XXII Simposio Internacional en Ciencias del Deporte celebrado en Costa Rica. Para mí era impensable poder ir, tanto por mi régimen de docente-funcionario como a nivel organizativo, pues este año desempeño las funciones de Director en el C.E.I.P. Rafael Alberti (Arroyo Coche, Málaga) y me era imposible. Al volver, empezamos a recibir multitud de correos electrónicos y gente a la que le ha llamado la atención. Después, nos lanzamos a redes sociales en Twitter y Facebook así como creamos la Página Web Oficial y… Hasta el día de hoy.
¿Puede decirse entonces que las redes sociales ha marcado diferencias en que Baloncodo tenga sentido?
Absolutamente. El enorme poder que tiene Internet es difícilmente comparable con ningún otro medio a día de hoy y, dentro de esa red, con diferencias las redes sociales cobran especial protagonismo por su sencillez y cercanía.
Hablas siempre en plural, ¿Quién forma Baloncodo?
¡Es cierto! Alguna que otra vez me lo han preguntado, pero es que es verdad. Baloncodo no sería posible sin muchas personas que desinteresadamente nos ayudan cada día, destacando a Dani Benavides por su especial apoyo; a todas las familias que en su día vieron el proyecto como una oportunidad de aprender y no como una pérdida de tiempo en la escuela; y por supuesto, a los niños y niñas que fueron diseñando palmo a palmo cada elemento de juego de esta disciplina deportiva.
Entonces, ¿Se trata de un deporte nacido en Educación?
Así es, al 100%. Baloncodo sin la escuela no tendría ningún sentido. Cada elemento que lo constituye es una estrategia, de una forma u otra, para educar desde tempranas edades e incluso en otras etapas adultas. El colectivo prima por encima de cualquier otro aspecto.
Hace poco visitaron el Pabellón de Deportes de la Universidad de Málaga para realizar una exhibición a los estudiantes de Magisterio ¿Qué relación tiene este deporte con la universidad en general?
Al tratarse de una creación que nace de una Tesis Doctoral, su origen se encuentra vinculado íntegramente al ámbito universitario. El alumnado del Grado de Maestro nos recibió de forma afectuosa y verdaderamente las sensaciones fueron muy buenas. Nos preguntaron si existía esta modalidad dentro de las Ligas Universitarias del Trofeo Rector de la UMA.
¿Y existe Baloncodo entre las disciplina deportivas del Trofeo Rector?
En la actualidad no estamos inmersos en esta competición. No obstante, y en vista de la respuesta de estos alumnos/as, hemos realizado una propuesta tanto a la Universidad de Málaga como al resto de universidades andaluzas de incluir Baloncodo en las distintas ligas universitarias.
¿Veremos a Baloncodo pronto como un deporte más entre las competiciones universitarias?
Espero que sí. La respuesta de la gente en general está siendo muy buena, y eso dice mucho del proyecto. Nos falta un poco esa estructura básica en la que toda modalidad deportiva se apoya para seguir impulsando sus propuestas. En ello estamos en la actualidad. Pero sí, apuesto porque Baloncodo estará pronto en los pabellones universitarios disputándose como una competición más entre sus ligas.
En su reglamento, página web y publicaciones se argumenta que Baloncodo es un deporte mixto, cultural, inclusivo y educativo. ¿Cómo se incluyen esos factores simultáneamente en el deporte?
El hecho de que chicos y chicas practiquen deporte a la vez ya de por sí es un progreso importante. Desgraciadamente, aún existen estereotipos en el propio contexto educativo en los que los niños acaban jugando por un lado y, las chicas, por otro. Desde el principio del proyecto siempre tuvimos claro que lo que queríamos era un deporte en el que los esfuerzos no fueran tan físicos como cognitivos o conductuales. Esa inclusión se plasma en el protagonismo repartido que los jugadores y jugadores sienten durante su práctica.
¿Y cómo se crea un deporte?
Es otro aspecto que cada vez nos preguntan más a menudo. Quizás la clave esté en que no se planea. Todo acaba naciendo de una idea. Salvando las diferencias, claro está, Newton lo vio claro con una manzana. Para nosotros y nosotras esa «manzana» ha pasado por diferentes fases: reglas y normativa, dimensiones del terreno de juego, características del esférico, etc. El alumnado fue el protagonista de toda la historia, que es lo verdaderamente bonito, y a título personal como su docente lo que hacía era supervisar, asesorar y acompañar ese descubrimiento guiado de la mejor de las formas posibles.
¿Y crear un deporte inspirado en El Cenachero?
A eso si que no te puedo responder. Es lo que más llama la atención aquí en Málaga y también fuera. Mucha gente está conociendo a El Cenachero también gracias a Baloncodo. Tiene una historia preciosa y para nosotros es un orgullo poder contribuir a llevar nuestra tierra allá por donde Baloncodo pise.
Ya se practica en La Rioja, País Vasco, Castilla La Mancha, Córdoba, México, Uruguay, Costa Rica,… ¿Hasta dónde quiere llegar Baloncodo?
Nuestra meta está en conseguir que sea uno más, que forme parte de esa cultura deportiva de nuestro país. Somos ambiciosos/as en ese sentido, y no siempre es fácil conseguir eso sin apenas recursos económicos o humanos. La ayuda desinteresada de otros docentes universitarios y de la educación primaria y secundaria, así como otros profesionales del mundo del periodismo y del deporte en general, es la que nos está permitiendo crecer. Ojalá continúe por este camino, buena señal será.