Un dibujo de un niño cuenta la historia más allá de los recuerdos. Tras más de seis años de trabajo, José Antonio Gallardo Cruz ha presentado ‘La infancia en la Guerra civil Española (1936-1939) Cines y teatros dibujados por niños. Editado por la Universidad de Málaga, este ensayo recoge un total de 44 dibujos, 32 directamente relacionados con los cines o los teatros y 12, con sucesos ajenos a los espectáculos públicos.
De la mano de la responsable de UMA Editorial, Rosario Moreno-Torres Sánchez, la obra fue presentado ayer en el Rectorado de la UMA. El acto contó con la asistencia del autor y un invitado especial, Pedro Castro Vizcaíno; “niño” de la guerra que contó sus vivencias en el Madrid sitiado. La reconstrucción del espacio temporal de las obras analizadas permitió al autor exponer la relación de los dibujos con los hechos históricos.
De este modo, previo a los dibujos Gallardo Cruz presenta la historia de los niños, principalmente de zonas republicanas, exiliados en las colonias españolas y extranjeras. El cine de la época, así como el teatro, guarda un importante papel, reconstruyendo la realidad vivida antes y durante el conflicto. Y es que lo principal de esta obra es la importante labor de recopilación de fuentes y nexos llevada a cabo por su autor. Así, Gallardo Cruz ha conseguido establecer una conexión entre lo que al principio solo eran dibujos con la historia de España. Pequeñas imágenes que crean memoria, conectada con las vivencias y hechos más relevantes.
En comparación con la fotografía, los dibujos presentan un esfuerzo psicomotórico y cognitivo mayor. Esto es así debido a que, como señala el autor «requiere de mayor participación por parte de quien lo realiza».
Los dibujos hablan
La Guerra Civil española es la primera vez en la historia que se usa el arte como terapia a escala masiva para niños traumatizados por los desastres de la guerra. Así lo señala Anthony L. Geist, profesor de la Universidad de Washington que firma el prólogo, quien además refuerza la importancia de los docentes en la educación artística de la época. Sería a a finales del siglo XIX cuando los maestros y maestras comienzan a dar mayor valor al dibujo infantil, no solo como esparcimiento sino como terapia y método de formación. De este modo, sin dejar de lado el componente educativo del dibujo, Gallardo aprovecha para reconstruir la figura de varios docentes.
En las colonias de la República española, los menores podrían transmitir sus miedos y visiones a través del papel, llegando a nuestros días. Así, gracias a la mirada del investigador, desde los dibujos infantiles se llega a documentos y archivos que muestran una realidad de la que no siempre se tiene constancia. Desde usos dados a edificios, la programación de los espectáculos hasta incluso ataques aéreos a zonas que no ha sido reconocidos por la historia.
En 374 páginas, el análisis de las obras autobiográficas se convierte en reportajes de guerra y paz, dando luz al conflicto desde los ojos de los niños. Estas obras reflejan también adoctrinamiento de la época, presente en los espectáculos que los jóvenes podían ver. Todo ello sumando a la vez un profundo análisis del cine de la época.
Desde la Editorial de la UMA se contempla la posibilidad de hacer una exposición con las obras analizadas. El libro puede adquirirse, junto a otros títulos de UMA Editorial, en las oficinas del Servicio de Publicaciones y Divulgación Científica, así como en varias librerías de la ciudad.