El que fuera ministro de Educación entre 2009 y 2011, presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) entre 2007 y 2009, y actual catedrático de Filosofía en la Universidad Autónoma de Madrid, Ángel Gabilondo, considera que el planteamiento del actual ministro de Educación, José Ignacio Wert, de dejar libertad a las universidades para que puedan implantar grados de 3 años y másteres de 2 -en lugar de los actuales grados de 4 años y másteres de 1, comunes en todas las universidades-; puede producir un «desequilibrio en el mapa de titulaciones», por lo que apela a que todas las universidades españolas se coordinen para no generar más «inquietud e incomodidad» en el seno de la comunidad universitaria.
Así lo ha señalado Ángel Gabilondo en declaraciones exclusivas a Aula Magna, momentos antes de la inauguración ayer de las XXV Jornadas de Formación AUGAC que se celebran en la Universidad de Córdoba (UCO), donde un centenar de profesionales de gabinetes de comunicación de una treintena de universidades españolas debaten también durante hoy sobre cómo gestionar la marca universitaria, como ya ha informado este periódico.
Ángel Gabilondo afirma que desde el actual Ministerio se apela a la autonomía universitaria para dar libertad a cada universidad a la hora de implantar el ya conocido como 3+2, pero, «aunque no soy partidario de dictar órdenes», y por tanto, de que sea el poder político el que fije una norma rígida; «pienso que en este tema las universidades deberían coordinarse entre sí, para que no se creen desequilibrios en el mapa de titulaciones«.
En este sentido, el exministro de Educación recuerda que lo que se ha hecho ahora es «reabrir un debate» que ya realizó la universidad española en su día, cuando ante el fin de las antiguas licenciaturas y diplomaturas «se decidió que en 3 años parecía difícil que se pudieran adquirir los conocimientos» que antes se impartían en las carreras de cinco años.
Impacto económico para los estudiantes
Además, Ángel Gabilondo pone el acento en el hecho de que el 3+2 también tiene «un impacto económico», en la medida en que los másteres son más caros, y con grados de 3 años la mayoría de los estudiantes optarán por cursar estos másteres y permanecer en la universidad durante 5 años, «con lo que ahora parece que volvemos al sistema anterior».
Con todo, y al ser preguntado sobre los reformas que el actual Ministerio está promoviendo en el sistema universitario, Gabilondo indica que «son cambios de mucha intensidad e impacto para una comunidad universitaria que ha hecho muchos esfuerzos en los últimos años, por lo que plantear ahora nuevos esfuerzos y tareas es complicado».
Así, y en relación al nuevo sistema de acreditación del profesorado que plantea Wert, el también expresidente de la CRUE considera necesario que haya coordinación y acuerdo entre las universidades y los agentes sociales, porque si no este sistema «será ineficaz».
Becas por necesidades económicas
¿Y qué le parece el nuevo modelo de concesión de becas? Para Ángel Gabilondo el debate sobre las becas debe ir ligado a un debate más general sobre el modelo de financiación de las universidades y de las tasas universitarias, «donde hace falta también un pacto territorial».

«No me parece mal que para la concesión de becas se planteen unos criterios mínimos de exigencia (en referencia a los criterios académicos que ahora se han elevado), pero las becas no deben ser concedidas por méritos, sino por necesidades económicas«, declaró a Aula Magna, desarrollando una idea que posteriormente abordó en su ponencia inaugural en las citadas XXV Jornadas de Formación AUGAC, donde señaló que «no debemos confundir las políticas sociales con los incentivos a la excelencia».