Julia Herrera, representante estudiantil de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y de Montes (ETSIAM), y Enrique Rafael Salinas, representante de la Facultad de Ciencias del Trabajo, protagonizaron este martes el segundo debate abierto entre candidatos a presidir el Consejo de Estudiantes (CEU) de la Universidad de Córdoba (UCO) que se celebra en esta universidad en sus 43 años de historia, después del que el pasado año protagonizaron José Antonio Alés y el presidente ahora saliente, Julio Camacho, bajo la ‘batuta’ del mismo moderador, el vicerrector de Estudiantes de la UCO, Alfonso Zamorano.
Con este debate, que se celebró en el salón de grados de la Facultad de Ciencias de la Educación, comenzaba la particular campaña electoral de estas elecciones a la Presidencia del CEU, que ambos candidatos vienen desarrollando desde entonces, visitando todas las facultades de la UCO para presentar sus programas e ideas, de cuyas líneas principales ya informó Aula Magna. Campaña que se prolongará hasta este domingo y tras la que, jornada de reflexión mediante, el martes 17 los 33 plenarios del CEU están llamados a votar de 12.00 a 19.00 horas, periodo en el que permanecerán abiertas las urnas en el Rectorado.
Con el presidente saliente, el anterior candidato y la ‘verdadera’ candidata
Respecto al debate, éste tuvo menor contenido y unas intervenciones y turnos de réplica de los candidatos bastante más cortas que en el debate celebrado el pasado año, aunque la intensidad y el interés fue in crescendo a medida que los candidatos avanzaban en su discurso, y sobre todo, en el turno de preguntas que posteriormente realizaron parte de la veintena de estudiantes asistentes.

Entre ellos, se encontraban los citados candidatos del pasado año, y la representante estudiantil de Derecho y Ciencias Económicas y Empresariales, Cynthia Bustos, que como el propio Enrique Rafael Salinas explicó en su primera intervención, comparte candidatura con éste. De hecho, la ‘verdadera’ candidata a presidenta iba a ser esta alumna, siendo Salinas el candidato a vicepresidente, pero un problema administrativo justo el día de presentación de las candidaturas les obligó a cambiar el orden, encabezando el proyecto el actual presidente en funciones del Consejo estudiantil de Ciencias del Trabajo.
Programa y ¿650 euros?
Minutos después de las 17.00 horas, Alfonso Zamorano daba comienzo al debate con el turno de presentación para ambos candidatos, que abrió Enrique Salinas en virtud del sorteo realizado previamente, y que se estructuró -al igual que el pasado curso- en cuatro bloques temáticos en los que los candidatos fueron explicando sus propuestas en torno a ‘Organización interna del Pleno del CEU’, ‘Docencia en la UCO’, ‘Infraestructuras y Servicios de la UCO’ e ‘Implicación de los estudiantes de la UCO’.
Tras la intervención de presentación del primer candidato, Julia Herrera hizo lo propio y, dirigiéndose al público, se levantó de la mesa para entregar a los asistentes una copia de su programa, cuyas principales propuestas fue explicando a lo largo de sus intervenciones, al igual que el otro candidato. (Programas que pueden consultarse pinchando en las imágenes adjuntas).

En concreto, tres turnos de palabra por bloque temático, donde la intervención que capitalizó buena parte del debate, y captó el interés -para bien o para mal- de los asistentes, vino casi al final, en el cuarto bloque temático sobre cómo fomentar la implicación de los estudiantes de la UCO; cuando Enrique Rafael Salinas afirmó, en su apuesta por medidas para que se reconozca la labor de representación estudiantil, que según cálculos realizados por su candidatura «la representación nos cuesta unos 650 euros al año», por lo que, además de reconocimiento de créditos, este candidato defendió que las tareas de representación «no nos cuesten dinero, para lo cual la UCO debería facilitar bonos de comida, de transporte, descuentos en algunos temas o algún tipo de incentivo».

Cifra de 650 euros al año ante la que, seguidamente, Julia Herrera mostró su extrañeza y le preguntó que de dónde salía, dando así voz a una pregunta que este argumento generó inmediatamente entre la mayoría de los asistentes.
Posteriormente, Enrique Rafael Salinas explicó que para este cálculo, además de costes de comida y transporte, su candidatura realizó una estimación del coste del tiempo empleado en la representación estudiantil, en función, también, de los créditos que se reconocen pero que, en todo caso, el estudiante debe pagar.
Respecto a la propuesta de este candidato de dar al representante algún tipo de incentivo o bono de descuento, Julia Herrera se mostró contraria, indicando que la labor de representación «es una labor desinteresada, y el tener algún incentivo o privilegio distanciaría al representante del resto de estudiantes».
Turno de preguntas
Llegados a este punto, el vicerrector de Estudiantes dio paso a un turno de preguntas de los asistentes, donde hasta 13 alumnos -algunos de ellos por partida doble y una estudiante que solicitó a ambos candidatos su correo electrónico para formularles cuestiones por escrito-, plantearon a los candidatos diversas cuestiones, buena parte de ellas relacionadas directamente con el funcionamiento del CEU y de los consejos de estudiantes, y con la controversia generada en torno a los ‘650 euros’ y los gastos que supone la representación estudiantil.
Entre ellas, un representante de Ciencias de la Salud les preguntó a ambos candidatos si eran simpatizantes de algún partido político, a lo que Julia Herrera respondió no tener ninguna relación con ningún partido -como posteriormente afirmó Cynthia Bustos al ser también interpelada-; y Enrique Rafael Salinas dijo ser simpatizante de Ciudadanos, aunque apostó por la «despolitización en el CEU» de ser elegido presidente, y que «si hubiera en todo caso algún problema por este motivo, yo me comprometo a desvincularme de este partido».
Cierra el vicerrector
Esta ronda de preguntas fue el colofón de un debate de poco más de dos horas de duración -frente a las tres horas del curso pasado-; tras el cual el vicerrector de Estudiantes de la UCO, Alfonso Zamorano, intervino en último lugar.
El vicerrector ofreció al que resulte ganador «diálogo y mano tendida, ya que, no en vano, más del 80% de las propuestas que ambos han planteado pasa por el diálogo conmigo mismo, como vicerrector, y con el resto de órganos rectores y centros de la UCO».
Y con el deseo de que «gane el mejor, el que más votos tenga», Alfonso Zamorano dio por cerrado este debate.