Alfonso Zamorano: “La premisa es que nada de consignas políticas”

Alfonso Zamorano Aguilar (Córdoba, 1975) es vicerrector de Estudiantes de la Universidad de Córdoba desde junio de 2014, Vicerrectorado al que llegó formando parte del equipo que ganó las elecciones rectorales hace ahora algo más de tres años, encabezado por el actual rector, José Carlos Gómez Villamandos. Doctor en Filología y profesor titular de Ciencias del Lenguaje, previamente fue vicedecano de Calidad, Infraestructuras y Proyección de la Facultad de Filosofía y Letras de la UCO, y, entre otras responsabilidades en materia de gestión, Alfonso Zamorano fue adjunto al Comisionado para la Gestión de la Calidad y Programas de Innovación de la UCO entre 2004 y 2006, y evaluador en la Comunidad de Madrid para el seguimiento de los Títulos Oficiales en 2012.

Tras plantearle Gómez Villamandos la posibilidad de ser vicerrector de Estudiantes, Zamorano declaró en 2014 que éste era un “reto ilusionante”. Desde entonces, y durante los últimos tres cursos, no ha dejado de repetir que los alumnos son “Nuestra razón de ser en la Universidad”. Sobre su llegada al Vicerrectorado comenta que se enteró una semana antes: “Yo creía que era la opción que debía ganar y una semana antes me llamó y me dijo que podía hacer una buena labor en ese ámbito, además me señaló que llevaría la cuestión de los estudiantes añadiendo otras cuestiones que generalmente no llevan estos vicerrectorados, como son todo el tema de control del profesorado y luego calidad docente, que tampoco suele estar vinculado a estudiantes, así como bibliotecas que creo está relacionado con mi perfil de Humanidades”. De su gestión al frente del Vicerrectorado de Estudiantes de la Universidad de Córdoba recalca que

“lo que hice fue llevar algunas de las ideas que tenía como vicedecano intentar extrapolarlas. Siempre he tenido como principio que es más importante crear un plan institucional que pequeños planes por facultades, es más trabajo pero si todas las fuerzas se unen la percepción quedamos como universidad es más importante y persistente”

Del programa previsto para llevar a cabo en cuatro años se puede afirmar que está completo al 80%, siendo el proyecto Alumni, destinado a crear un espacio a los antiguos estudiantes de la UCO, el único tema pendiente.

¿En qué situación se encuentra actualmente el CEUCO y por qué ha habido tantos problemas para encontrar un presidente o presidente en este órgano?

En realidad no es que haya habido muchas dimisiones, ha ocurrido una situación que no ha pasado antes pero que se puede dar en muchas instituciones y órganos colegiados. Desde el primer día me reuní con los estudiantes, además me gusta ir a sus consejos y me desplazo con ellos para ver los problemas de primera mano. Siempre digo lo mismo, no quiero consignas políticas, cada uno que vote a quien quiera pero que la única consigna que debemos tener es la UCO. Yo sé que en otras universidades, y es algo de lo que presumo cuando hablo con otros vicerectores por problemas, tienen problemas por la excesiva politización, y en mi caso puedo decir que nunca ha habido eso. Si lo hay son cuestiones que se quedan en la cuestión personal.

La premisa es que nada de consignas políticas. Soy un vicerrector que tampoco estoy encima de ellos, son personas adultas  y nos reunimos y estoy pendiente de ellos cuando lo necesitan pero les dejo su independencia y su responsabilidad. En un determinado momento, sobre abril del año pasado, hubo disputas internas como las hay en todas las instituciones y los que estaban en el CEUCO consideraron que ya no querían estar. Eran enfrentamientos como los que hay en cualquier sitio, además de la presión de los exámenes. Ante la dimisión de una persona, los demás miembros del equipo también consideraron que debían irse. Nuestro reglamento no incluye como actuar, hay un vacío legal sobre qué pasa cuando toda la mesa está ausente, pues la norma dice que es el presidente saliente quien convoca las siguientes elecciones. En este caso como no lo había consideramos en la Comisión de Asuntos Estudiantiles, una comisión con mayoría de estudiantes, que quedaba un mes para acabar el curso y con los exámenes de entonces y los de septiembre apenas había estudiantes. Creamos un grupo de trabajo donde estaba yo y los 10 presidentes más uno (del centro adscrito) y en lugar de tener que hablar con una sola persona ahora tenía que preguntarle a las 11, como en muchos temas antes he hecho. Parecía que iba ser complejo pero ha ido muy bien. Creamos un grupo de whatsapp y la consigna es que se hacía una pregunta y sin conversaciones de risa se daba una respuesta. Así hemos trabajado hasta que ha estado el censo constituido, porque esa es otra, hasta que no empieza el curso no está el censo de todos los estudiantes, sin que pueda haber elecciones a presidente. Ya tenemos el censo cerrado y se han hecho las consultas pertinentes a asesoría jurídica para ver como deben ser ahora las elecciones y nos han recomendad un itinerario que hemos seguido: me reúno con todo ellos y se nombra a un “presidente accidental” y a un secretario en pleno y entonces ejercen como tales a efecto de convocar elecciones. El proceso fue al final que me reuní con ellos y se eligió los dos cargos. Actualmente ya han dejado de tener esos cargos porque el proceso ya ha comenzado, según me han comentado ya hay varios grupos que quieren presentarse  de forma armoniosa. A partir del 16 de noviembre tendremos nuevo presidente. Es algo que se podría haber hecho antes, pero por la falta de censo y por los exámenes acordamos que esta era la mejor opción, sin que haya sido traumática para ninguno, aunque para mi sí ha supuesto más trabajo pues no es lo mismo hablar con uno que con 10.

¿Es más fácil hablar con un solo representante que con 11?

Respeto la representatividad que tiene cada uno, ante una cuestión que afecte a todos yo hablaba con el presidente y desde allí me transmitían lo que tuvieran que decir. Con las delegaciones, al final del cuatrimestre me reúno con todas ellas para que me expongan sus inquietudes y problemas, elaboro un informe y un plan de mejoras. Parece que surten efecto, de hecho en estos cuatro años las encuestas de percepción del profesorado por parte del alumnado han ido en aumento, el año pasado en concreto (2016-2017) la media de la UCO está en un 4.1 y hacía muchos años que no conseguíamos esa media. La sensación de que los problemas se abordan, unos son más difíciles y otros más rápidos, y eso lo perciben ellos. Me escriben desde cualquier medio porque ven que las cosas se solucionan y yo siempre intento respetar la cadena de mando, pero me gusta estar informado de todos los problemas.

¿Cómo se financian las delegaciones de alumnos?

En la Universidad de Córdoba cada delegación tiene un porcentaje del presupuesto de cada centro, lo recomendable es entorno al 10%, que se destinan a los consejos de centros. Depende también del número de actividades y su relación con los centros, sin embargo muchas de estas actividades las coordinamos desde el Vicerrectorado. El CEUCO no tiene un presupuesto fijo si no que tiene un presupuesto en función de un informe que me entregan a principio de curso y se ven todas las actividades que quieren hacer. Me han preguntado a veces la posibilidad de tener un presupuesto como en otras universidades pero cuando les muestro los números en muchos casos superamos los gastos que otras universidades con presupuesto cerrado no pueden sufragar.

Yo siempre digo que todo lo que sea formación y representación estudiantil siempre se sufraga, para el resto se me presenta un informe y rara vez he dicho que no a algo. En las comisiones suelo presentar lo que se sufraga y suelen estar satisfechos, son conscientes de que si el presupuesto fuera cerrado sería más complicado aunque sería más cómodo para mi porque llegaría un momento en el que si se agota pues ya no hay presupuesto y no se puede financiar más. Sin embargo hay cuestiones que merecen la pena y la previsión no está clara como en otros vicerrectorados, y esto son actividades que grupos de alumnos quieren hacer de un mes para otro o una reunión. Por ejemplo, ahora me han escrito para ir a Algeciras, esto no lo pueden prevenir un año antes, así que con un presupuesto cerrado cosas así no se podrían atender. No solemos tener nunca problemas de dinero. En nuestro caso intento ser homiguita y sufragar cualquier actividad.

¿Las Delegaciones cuentan con presupuesto de la Junta de Andalucía?

Por parte de la Junta de Andalucía se da todos los años 5.000 euros a todos los consejos, en CEUCO incluido.

¿Cómo se trabaja en la atracción de nuevos estudiantes?

A través de un programa institucional, el IV  PLAN de captación de estudiantes PACE, que incluye tres línea de programa. Estas son:

1. Visitas de la UCO  los centros de educación secundaria privados y públicos, así como FP.
2. Visitas de los alumnos a la universidad.
3. Actividades de distintos tipo lúdico académicas, tipo olimpiadas donde hay modalidad para estudiantes preuniversitarios, donde se crean relaciones entre alumnos de la universidad y preuniversitarios.

Por ejemplo el año pasado tuvimos un concurso de iluminación de edificios históricos en el que participaron estudiante preuniversitarios y universitarios, porque hay que incentivar las titulaciones con menos demanda, por ejemplo Ingeniería Eléctrica pues hay un plan específico para esta titulación. A través de Philips se financió una parte importante y se iluminó la Facultad de Filosofía y Letras, yo formé parte del jurado del premio y se presentaron proyectos espectaculares. Hay varios premios y concursos para atraer a los alumnos a estas titulaciones menos demandadas.

De los programas que ellos vienen aquí el más fuerte es ORIENTAUCO, con un resultado muy positivo. Además hay dos acciones de presencia nuestra en dos oficinas, con un grupo de 80 profesores que van a informar a los estudiantes sobre distintos temas de la carrera. Este programa se caracteriza por ser un plan institucional, con su apartado web donde los institutos demandan lo que quieran ya sea venir o que vayamos. Ahora todo se hace de manera centralizada y coordinada con todos los centros. Me reúno con ellos y organizamos tanto la puesta en marcha de la recepción de los alumnos de primero como el plan de atracción. Creemos que llegar a los orientadores es muy importantes, hacemos también contacto con las AMPAS de cada centro.

¿Se han visto mejoras en la atracción de estudiantes a Belmez?

Las acciones no pueden ser de un año para otro, observamos que aumenta el número poco a poco, así como la calidad del estudiante. Las ingenierías resultan menos atractivas. Llevamos todos los años 400-450 alumnos allí, y este año vamos a activar las 15 becas de alojamiento gratuito en Belmez, pero claro esto no se ve de un año para otro. Lo importante es que nos mantenemos.

¿Y sobre la atracción de estudiantes de alto rango académico?

Tenemos una beca que los que los alumnos que obtienen más de un 8.5 en bachillerato les llevamos a una escuela de verano. Vienen aquí, a la universidad, una semana con los gastos pagados y se les organiza distintos tipos de actividades tanto en laboratorio como en otras disciplinas de trabajo. Este año hemos dado premios a los mejores expedientes de la PEVAU, las 20 mejores notas las hemos distinguido. Luego, en el ámbito de la ingeniería, tenemos programas más centrados a su atracción, para aumentar el número de alumnas, que se incentivan desde el Vicerrectorado de vida universitaria, que lleva el tema de igualdad.

Queremos captar a los mejores y luego, cuando están aquí, ya tenemos las becas de excelencia académica, donde se potencia el conocimiento del idioma y el expediente.

¿Cómo afecta la bonificación de las matrículas a las becas de la UCO?

En previsión de los datos no hemos eliminado el programa de becas solidarias y de exclusión social, en principio venimos sufragando a unos 400 estudiantes que no llegan a los puntos de la beca MECD, pero con la bonificación no sabemos el alcance que va a tener y hemos prevenido mantenerla, hasta que no veamos que efectivamente no es necesaria. En total son 230.000 euros de becas de solidaridad y exclusión social.

¿A los estudiantes se les trata como niños?

En mi percepción y en la manera que yo trato a los estudiantes se ve que no lo hacemos, nunca los he tratado así ni como profesor ni como vicerrector. Cuesta trabajo crearles una conciencia y yo trabajo con alumnos de primero, es una mezcla de que son pequeños pero no son niños, hay que crear una corresponsabilidad y no sancionarlos. Ni los trato como niños ni ellos se comportan como tal.

¿Cuáles son las medidas que quedan por aprobar del programa?

Me queda una medida que espero activar este año, es la creación de ALUMNI. Aquí existía una asociación de antiguos alumnos y creo que ALUMNI tiene que ser otra cosa diferente y es en lo que quiero trabajar este curso. En la UCO hay una asociación, pero que no tenía actividad y además creemos que sus objetivos deben ser otros en 2017.

Hemos tenido muy buenos alumnos y hay que darle una vuelta a ese tema. El cambio tiene que ser estructural por lo que no me he podido centrar en estos tres años.