La Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), máxima representación de las instituciones universitarias frente al Estado, acuerdan una moratoria de dos años para implantar el modelo de los grados a tres años con máster de dos. Esta, es una petición que los rectores realizaron al Ministerio de Educación y, ante su negativa, la han acordado por ellos mismos.
Además, esta ha sido una constante petición de los estudiantes universitarios representados en distintas organizaciones, como la Conferencia de Representantes de Estudiantes de Universidades Públicas (CREUP), que en rueda de prensa ayer lunes, volvió a solicitar a la CRUE que acordaba esta moratoria de dos años porque «no hemos terminado de implantar el modelo 4+1 y evaluar sus consecuencias y tratan de imponer un nuevo sistema», como destacan desde este órgano representativo.
Fue el pasado viernes 30 de enero cuando el Consejo de Ministros dio luz verde a la reforma del Real Decreto 1393/2007, de 29 de octubre, que regula las carreras universitarias en España y que incorpora modificaciones que no han sentado bien a la mayoría del sector educativo universitario español. En esta, se incluye la opción de implantar grados de 3 años (de 180 a 240 créditos) con máster de dos años, aunque realmente se refiere a máster de 60 a 120 créditos.
El objetivo es el de «converger con la mayoría de los países europeos que han desarrollado sistemas universitarios de calidad», puesto que el sistema 4+1 es una «rareza» en el ámbito europeo. El carácter de la medida es voluntaria, es decir, las universidades podrán acogerse a su autonomía universitaria para decidir si implantan o no esta reforma.
Otro de los objetivos de la reforma es el de facilitar el acceso de alumnado extranjero a nuestras universidades, puesto que el modelo 4+1 ofrece complicaciones a la hora de convalidar los títulos universitarios fuera de España, ya que nuestros países vecinos más cercanos no ofrecen este modelo, sino el 3+2, caso de Francia, Reino Unido o Alemania.
Por otra parte, y precisamente haciendo gala de esa autonomía universitaria a la que se refieren desde el Ministerio de Educación que dirige José Ignacio Wert, la CRUE (compuesta por 50 universidades públicas y 26 privadas) acordó este lunes durante su Asamblea General en Madrid por 57 votos a favor, uno en contra y cinco abstenciones una moratoria de dos años (hasta 2017) para no implantar, de momento, esta medida.
Además, piden a todas las universidades y comunidades autónomas que no se comience la tramitación de propuestas al amparo de esta disposición hasta septiembre de 2016, para poder hacerlo «de una forma prudente y preservando de este modo la cohesión del sistema universitario español». Desde este organismo consideran que es «prioritario culminar primero la evaluación de las titulaciones actualmente vigentes», en referencia a los grados a cuatro años, al tiempo que se requiere como necesario llevar a cabo una reflexión sobre el futuro de la Universidad española también en lo referente al modelo de financiación«, como reza en su comunicado.
Los estudiantes también critican la reforma, como es el caso del CREUP, pero como también manifestaron desde otros organismos como la Federación de Asociaciones de Estudiantes Progresistas (FAEST). En el primer caso, desde CREUP, como ya declararon para Aula Magna, ven la medida como un lanzarse al vacío sin estudiar cómo ha afectado el actual sistema no sólo a la internacionalización de los estudiantes, sino a su calidad formativa y su inserción laboral. Critican por ello que no se haya hecho ninguna evaluación, como en otros países sí se está haciendo, del sistema adoptado hasta ahora.