Recientemente, la Universidad CEU San Pablo ha recibido a expertos de 15 países y más de 30 centros educativos para compartir sus experiencias sobre Innovación Docente. Encuentro en el que han participado más de 350 personas con motivo del III Congreso Internacional de Innovación Educativa y Docente, organizado por el CEU y que ha tenido lugar durante los días 18,19 y 20 de enero.
Una cita con la innovación docente que, por primera vez, tiene carácter internacional, por lo que ha supuesto “un punto de encuentro, reflexión y debate sobre cuestiones esenciales que afectan de manera directa al sector educativo, que vive unos de sus momentos de transformación más importantes de las últimas décadas”, han detallado desde la Universidad.
Congreso sobre Innovación Docente
Durante el acto de inauguración del III Congreso Internacional de Innovación Educativa y Docente, Javier Tello, director general de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, recalcaba que esta iniciativa demuestra la importancia de la responsabilidad docente y educativa en la que “todos estamos involucrados”. Y es que, apuntaba, “la responsabilidad es una pieza clave de la transformación social a la que estamos convocados, una transformación que buscamos a través de la educación siempre con el objetivo final de conseguir un mundo mejor”. :
Palabras con las que, a su vez, destacaba que “la educación constituye la mayor palanca de transformación social y la innovación forma parte del corazón, de la esencia del compromiso que asumimos con nuestros alumnos. La educación es la llave del proyecto vital de nuestros estudiantes; si hay algo clave en su proyecto vital es la educación, en la que somos cooperadores imprescindibles”. :
Por último, Tello quiso resaltar la apertura exterior del Congreso sobre Innovación Docente a otras instituciones, profesionales y países pues “aquello que enriquezca el bien común en la filosofía del CEU es algo que debemos poner al servicio de todos”.
De este modo, en línea con el director general, Rosa Visiedo, rectora de la CEU USP, recordaba que “la innovación es una constante desde nuestra fundación, hace 90 años, y la actitud que nos impulsa para ser cada día mejores. Durante estos tres días compartiremos e intercambiaremos experiencias innovadoras entre nosotros para generar una cultura de mejora, de cara a afrontar los retos que la sociedad nos plantea”.
Aprendiendo a aprender
La ponencia de apertura corrió a cargo de la presidenta de la Fundación Trilema, Carmen Pellicer. Bajo el título ‘El impacto de las funciones ejecutivas en la innovación educativa’, la pedagoga recordó que “la innovación es la respuesta necesaria a la investigación, es un eje fundamental para activar el peso sobre el que pivotan los proyectos educativos de las instituciones académicas”. En este sentido, Pellicer señalaba que “debemos avanzar en cómo conocer la mente de los niños y cómo aprenden, algo que nos tiene que llevar a cambiar la forma de organizar la intervención educativa para que ese aprendizaje sea cada vez mejor. La innovación es una respuesta de fidelidad a la misión de cualquier institución educativa para garantizar la excelencia y las oportunidades de aprendizaje para todos”.
Asimismo, la pedagoga hizo hincapié en la necesidad de vincular la innovación a la transformación del alumno para poder revertir en la mejora del aprendizaje de los alumnos, especialmente en los más vulnerables. De igual modo, resaltó la figura del profesor como motor fundamental en este cambio pues, desde su punto de vista, “el docente debe identificar las fortalezas, el desempeño óptimo y los problemas que entorpecen el aprendizaje del alumno. Estos deben entender el lenguaje del pensamiento y de la actividad de entender. Aprender a gestionar la atención, ser más cognitivos. Es necesario, por tanto, hacer proyectos que respondan a la visión antropológica de los alumnos”.
Respecto a las funciones ejecutivas, la presidenta de la Fundación Trilema propuso un modelo de entrenamiento de funciones ejecutivas en el aula, basándose en tres claves fundamentales: de dónde vienen las buenas ideas, cómo tomamos buenas decisiones y cómo generamos hábitos que ayudarán al alumno en su proceso educativo. “Un proceso de conversión entre las experiencias y el conocimiento, cómo alimentamos los procesos generadores de experiencias de aprendizaje, cómo entrenarlos de forma sistémica para que modifiquen las estructuras neuronales del lóbulo central. Para ver las funciones hay que empezar a ver las disfunciones, responsables del 44% del fracaso escolar”, explicaba.
Igualmente, Pellicer recalcaba durante su intervención en este Congreso sobre Innovación Docente que “cualquier transformación del sistema educativo tiene que ser sistémica y debe afectar a cómo se aprende, cómo se enseña, cómo se evalúa, cómo se organiza la institución educativa alrededor de esa nueva visión del currículum vitae y, por supuesto, cómo se lidera ese cambio”. Y ha concluido señalando que “no hay un solo estilo docente, no hay una sola pregunta o respuesta”.
En cuanto al resto de jornadas, la del jueves giró en torno a la Internacionalización e Impacto en la Sociedad, con la participación de los expertos Cesare Wright, director de proyectos digitales de la Universidad de Santo Tomás de Houston; Juan Freire, vicerrector de Innovación y Transformación de la Universidad TecMilenio de Monterrey (México); o Juan Fernández, investigador sobre la ciencia del aprendizaje, entre otros.
Por último, el viernes la clausura del Congreso se centró en el área de Experiencias de Aprendizaje. Héctor Ruíz Martín, director de la ‘International Science Teaching Foundation’, experto en neurociencia y psicología del aprendizaje, y Alex Rayón, vicerrector de Relaciones Internacionales y Transformación Digital de Deusto, y director de Deusto BigData, entre otros expertos, pusieron el cierre a este evento.