El nuevo modelo de financiación del sistema público universitario andaluz contempla la puesta en marcha de un plan plurianual de inversiones para infraestructuras y digitalización. Así se lo ha trasladado el consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos, a los representantes del sindicato CSIF, con quienes se ha reunido para abordar las líneas generales del nuevo instrumento de reparto de fondos públicos en el que se está trabajando y para conocer sus propuestas.
Esta reunión forma parte de la ronda de contactos que está manteniendo Gómez Villamandos con todos los agentes económicos y sociales y con los representantes de la comunidad universitaria, con los que pretenden alcanzar “el mejor documento posible, fruto de la colaboración y el consenso entre todas las partes, que dé cumplimiento al Pacto Social y Económico por el Impulso de Andalucía”.
Nuevo modelo de financiación universitaria
El responsable de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación ha detallado que el nuevo plan plurianual de inversiones comenzará a aplicarse a partir de 2024, tras la finalización este año del actualmente vigente, y se prolongará hasta el ejercicio 2027. Su desarrollo se articulará teniendo en cuenta los principios rectores del modelo de financiación y estará orientado tanto a mejorar la dotación de equipamientos e infraestructuras, como a avanzar en la transformación digital de las universidades con la incorporación de soluciones y herramientas tecnológicas. Así, “con esta renovación y modernización de infraestructuras, las instituciones académicas podrán fortalecer su competitividad, mejorar su docencia y su actividad investigadora, incrementar su transferencia al tejido empresarial y, por ende, contribuir a un mayor desarrollo económico de los territorios en los que se insertan”, ha incidido el consejero.
Por otro lado, Gómez Villamandos ha señalado que el nuevo esquema de asignación permitirá a las instituciones académicas contar con los recursos necesarios para cubrir todos los costes salariales, de funcionamiento y de mantenimiento. Además, éstas podrán disponer de fondos para mejorar los resultados docentes, de investigación, de transferencia de conocimiento o de internacionalización y para fomentar otras acciones en las áreas de emprendimiento, apoyo al estudiantado, cultura o deporte, entre otras. Estas actuaciones se llevarán cabo a través de contratos programas estratégicos, que dependerán de las prioridades establecidas por cada una de las universidades andaluzas. Para el consejero, la vinculación de parte de la financiación a estos capítulos posibilita que el sistema mejore su posición frente a las instituciones del entorno nacional, europeo e internacional y su capacidad para atraer talento y aportar retornos económicos y sociales al territorio. :
Asimismo, Gómez Villamandos ha remarcado que la herramienta que se está perfilando contempla impulsar la armonización financiera entre todas las universidades “aplicando una serie de fórmulas que evitarán desviaciones como las provocadas por anteriores modelos”. Cabe señalar que el sistema universitario andaluz, compuesto por diez instituciones académicas, se caracteriza por su diversidad y heterogeneidad, “por lo que no es posible desarrollar un modelo lineal, sino un esquema que tendrá en cuenta la situación de cada una de ellas para avanzar hacia la convergencia”, ha añadido.