Seis millones de judíos fueron asesinados por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Pero también hubo personas que arriesgaron sus vidas para salvar a los judíos de los los verdugos nazis. Por ello el vestíbulo de la Facultad de Derecho de la Universidad de Málaga acoge la muestra ‘Para mí, no hay otra opción’, que recuerda al diplomático Raoul Wallenberg que salvó del Holocausto a miles de judíos. De acuerdo con las estimaciones, el número de personas que directa o indirectamente agradece a Wallenberg por sus vidas es de alrededor de 100.000.
Organizada conjuntamente por la Embajada de Suecia en Madrid y la Universidad de Málaga, la inauguración contó con la presencia de destacadas figuras del cuerpo consular, como los cónsules de Suecia, Hungría y Portugal. Contó también con la presencia de la vicerrectora de PDI, Yolanda García Calvente, y del decano del centro, Juan José Hinojosa. La muestra recorre la vida de Wallenberg, un empresario y diplomático sueco que en las etapas finales de la segunda guerra mundial estableció una ‘sección humanitaria’ especial en Budapest, dentro de la delegación sueca, cuya tarea principal era rescatar a los judíos húngaros.
Para lograrlo inventó un nuevo tipo de documento, un pasaporte protector denominado ‘Schutzpass’. Raoul Wallenberg desapareció con solo 32 años, después de la llegada de las tropas soviéticas a Hungría. Pero la exposición no recorre solo su vida, sino que su contenido va más allá de la semblanza biográfica y aborda la manera en que afrontamos nuestras responsabilidades como individuos y las elecciones morales que tomamos en la vida. El objetivo es inspirar a los estudiantes a reflexionar sobre temas relacionados con los derechos humanos. Por eso, en la inauguración se llevó a cabo un acto conmemorativo de la aprobación de la Declaración Universal de Derechos Humanos, con la participación de alumnos y profesores del centro.