Lleno en el Aula Magna de la Facultad de Humanidades de la UAL, en la primera presentación de ‘Averroes, sobre la substancia del universo’, de Juan Gómez, un libro definido como “una novedad en Europa” por su editor, Andrés Martínez Lorca
A partir del acto realizado en la Universidad de Almería se producirá una serie de presentaciones tanto dentro como fuera de la provincia. Eso precisamente ha puesto en valor Rafael Quirosa-Cheyrouze, decano de la Facultad de Humanidades, al reconocer que “es un honor” que el lanzamiento de ‘Averroes, sobre la substancia del universo (De Substantia Orbis)’, haya sido precisamente en el Aula Magna de su facultad. El autor de este libro es Juan Gómez Bonillo y su editor es Andrés Martínez Lorca, ambos almerienses de nacimiento e introducidos en el acto por parte de Pedro Molina, catedrático jubilado de Filosofía de la UAL.
La gran relevancia que atesora es que esta obra de referencia del filósofo andalusí solo se encontraba en latín.
Quirosa-Cheyrouze ha abierto el acto con la palabra “satisfacción” por contar con la asistencia de las personas que la han hecho posible y por “cumplir el objetivo de poder celebrar actividades que completen y complementen la actividad docente y formativa de los estudiantes”. En este caso, ha sido “un lujo albergar la primera presentación de este libro”, una oportunidad que no se ha dejado escapar por parte de los integrantes de la Facultad de Humanidades, profesorado y alumnado, que han llenado la sala. Eso es algo que ha agradecido Andrés Martínez Lorca, catedrático emérito de Filosofía de la UNED y editor de esta
obra, quien ha situado el contexto de la relevancia que tiene: “Lo que presentamos hoy es una novedad en Europa”.
Ha explicado que se trata de “un comentario de carácter cosmológico sobre la estructura del universo que escribió Averroes, que tuvo un gran éxito en la Escolástica y en el Renacimiento porque significaba una interpretación naturalista del universo”. A eso ha añadido que “por primera vez se intentaba explicar el movimiento del universo basado en la observación y las teorías aristotélicas”, y de ahí ha concluido con que “la importancia es que hasta ahora existía solamente el texto latino, medieval, pero no traducción a ninguna lengua europea moderna, y esa ha sido la labor que ha hecho Juan Gómez Bonillo”. Este último ha reconocido que “fue a instancias de Andrés Martínez”, ya que le propuso llevarla a cabo cuando era profesor de Historia de la Filosofía Antigua y Medieval en el Centro Asociado de la UNED de Las Palmas. :
No fue un trabajo sencillo, “el proyecto tuvo sus dificultades, pero en definitiva salió a flote, y además es un libro difícil”, matizando que es “de muy difícil lectura”. Eso sí, ha considerado que “para los estudiantes de Filosofía es esencial”. Así lo ha considerado a su vez un Pedro Molina que ha subrayado la relevancia tanto de la obra como de acoger en la UAL su lanzamiento: “Es la primera vez que se presenta esta traducción de un libro de Averroes que no había sido traducido al español”. Sobre el filósofo andalusí ha situado el foco al destacar que “es el pensador más importante de toda la edad media y renacentista, y probablemente uno de los pensadores más importantes de la historia de la humanidad”. Ha realizado una defensa “de lo que realmente fue de espléndida y de atractiva la cultura andalusí” en base a este texto del siglo XII.
En su intervención ha insistido en la aportación que supone “traducir al castellano por primera vez un libro de la cultura andalusí -el ‘Tratado Cosmológico’ traducido por Juan Gómez Bonillo-, obra del destacado y reconocido pensador Averroes, que además fue el mejor comentarista e intérprete de la obra de Aristóteles y, al mismo tiempo, el mayor difusor de su pensamiento en la edad media y que tuvo una extraordinaria influencia en el Renacimiento”. Así, ha subrayado la relevancia de “rescatar del olvido y del silencio un gratificante rayo de luz de la esplendorosa y radiante riqueza que supuso para nosotros y para toda la humanidad el extraordinario legado histórico cultural de Averroes”.