El Consejo de Gobierno de la Universidad de Córdoba (UCO) tiene previsto aprobar mañana los perfiles de la práctica totalidad de las 38 plazas de ayudante doctor cuya contratación ya fuera autorizada por la Junta de Andalucía a principios de este curso, ya que algunos de ellos no se aprobarán mañana, de momento, por no haber remitido los departamentos correspondientes toda la información necesaria para el perfil concreto de sus plazas, según informan fuentes universitarias.
De esta manera se avanzará en el proceso de la convocatoria de estas plazas llamadas, entre otras cosas, a consolidar a buena parte del colectivo de profesores sustitutos interinos de la UCO -siempre que saquen la plaza a concurso, no por promoción automática-, en la línea de la política de estabilización laboral del personal docente e investigador (PDI) prometida por el nuevo equipo de Gobierno de esta universidad; y que se regirá por las directrices del nuevo y controvertido baremo general de méritos para todas las plazas de PDI contratado (PDI laboral) que se convoquen por concurso público en esta universidad, que fue aprobado en el último Consejo de Gobierno del pasado día 5.
No en vano, y a pesar de que tras la aprobación de este baremo desde la UCO se resaltó que el mismo ha sido «consensuado tras un importante esfuerzo de reflexión y debate interno, que colaborará en reforzar la calidad y transparencia de estos procesos»; desde algunos sectores sindicales y de profesorado se viene cuestionando en las últimas semanas la existencia de un verdadero proceso de negociación y consenso, cuando no se ha puesto directamente en cuestión el propio contenido de este baremo.
Visión de los sustitutos interinos
En el contexto de los perfiles de las plazas de ayudante doctor que previsiblemente se aprobarán mañana, este baremo no convence a parte de los principales interesados y, a priori, ‘destinatarios’ de estas plazas en la UCO -concurso público mediante-, ya que, como señala a Aula Magna Juan Manuel Muñoz, presidente de la Asociación de Profesores Sustitutos Interinos de la UCO (PSIUCO, creada en septiembre para defender los intereses de este colectivo y mejorar su estabilidad profesional), este baremo «no responde a las expectativas de promocionar a los sustitutos interinos que actualmente trabajan en la UCO«, ya que, entre otras cuestiones, equipara a estos interinos con la figura de profesores asociados (profesionales que, teniendo otro trabajo, imparten docencia en la universidad a tiempo parcial).
Actualmente, la UCO cuenta con 150 sustitutos interinos, 89 de ellos a tiempo completo y 69 a tiempo parcial, más otros 10 cuyas plazas se habilitarán este 2015, según informó el rector en la reunión del Claustro del pasado mes de diciembre.
Primeras críticas desde los becarios FPDI
Con todo, los primeros en criticar abiertamente el nuevo baremo tras su aprobación fueron la Asociación de becarios en formación docente e investigadora (Asociación FPDI), que a mediados de mes indicaba en un comunicado que este nuevo baremo «equipara a alumnos colaboradores de Departamento con profesores e investigadores», y solicitaba una nueva redacción de este documento, «esta vez consensuada de verdad».
Al respecto, el presidente de la Asociación FPDI, Javier Sánchez, afirmó a Aula Magna que con este baremo la UCO «ha decidido que el mérito de conseguir una plaza de investigador o docente en concurso público (pues a las becas FPDI se accede por concurso) puntúe lo mismo que haber sido alumno colaborador: un punto por curso académico».
Con diálogo y consenso, según el rector
Algo que el propio rector de la UCO, José Carlos Gómez Villamandos, explica a Aula Magna que «no es cierto», ya que, sin entrar en excesivos detalles técnicos, señala que una vez tenidos en cuenta todos los criterios a valorar, los años de experiencia docente como becario y las propias ponderaciones que establece el nuevo baremo, «no se equipara a nadie con experiencia con un alumno colaborador».
En este punto, conviene señalar que el baremo de méritos aprobado establece, entre otras cuestiones, méritos preferentes y distingue cuatro grandes bloques temáticos a valorar: formación académica y gestión, actividad docente y experiencia profesional/clínica, becas y contratos, y actividad investigadora y de transferencia. Bloques entre los que se desglosan hasta 34 cuestiones por las que obtener puntos; que, a su vez, están ponderados según el tipo de plaza, pues el baremo afecta a todas las tipologías de PDI laboral.
Asimismo, el rector de la UCO resalta que el baremo sí se aprobó tras un proceso de diálogo con los representantes del PDI laboral y con el máximo consenso posible, aunque apunta, sin referirse ya a ningún colectivo concreto, que lo que no pueden pretender algunos «es que se haga un baremo o se convoquen plazas a la medida de las necesidades de cada caso».
¿Negociación o acercamiento de posturas?
Este diálogo sí se produjo con representantes del comité de empresa del PDI laboral, que el pasado 23 de enero se reunieron con el vicerrector de Personal de la UCO, Isaac Túnez, para negociar este baremo, como confirma el propio presidente de este comité, José Manuel Palomares, quien explica que en aquella reunión se consiguieron «modificaciones notables» respecto a la propuesta inicial, tras lo cual, y con el visto bueno de los miembros de los tres sindicatos presentes en esa reunión y representativos en la UCO (CSIF, UGT y CC.OO), se procedió a la firma del acuerdo.
No obstante, desde la sección sindical de CC.OO. de la UCO se cuestionó -justo dos días antes del Consejo de Gobierno del día 5 que aprobó finalmente el baremo-, la existencia de una «auténtica negociación» a nivel de comité de empresa del PDI laboral, mediante un comunicado en el que, sin poner en entredicho la «buena fe» de los firmantes del acuerdo, y reconociendo las mejoras incorporadas al borrador inicial propuesto por el vicerrector de Personal; se solicitaba reconducir el tema o posponer la aprobación del baremo para un Consejo de Gobierno posterior, petición ésta última que no fue tenida en cuenta, a tenor de la aprobación realizada en el Consejo del día 5. Comunicado que a la semana siguiente dio pie a otro comunicado rubricado por el presidente y secretaria del comité de empresa del PDI laboral defiendo el trabajo de este comité.
En todo caso, y sin entrar en si la negociación previa del baremo siguió o no los cauces formales, habituales y/o necesarios, según el criterio de las distintas fuentes consultadas por este periódico, ya en la antesala del Consejo de Gobierno de mañana, el presidente del comité de empresa del PDI laboral afirma a Aula Magna que el baremo aprobado «perfecto no es, pero analizándolo globalmente es razonablemente bueno».
«Es evidente que no es el baremo que deseábamos, pero uno de los aspectos que hay que tener en cuenta es que cada bloque se evalúa y se pondera por separado, y además busca la competencia entre los propios candidatos que se presenten a cada plaza, por lo que no es un baremo o puntuación absoluta, sino que también va en función de los que opten a cada plaza, con el objetivo de seleccionar siempre a los mejores», señala Palomares.
Investigación versus docencia
Por su parte, Gómez Villamandos confirmó que, lógicamente, en la convocatoria de las nuevas plazas de ayudante doctor se utilizará ya este nuevo baremo, con lo que los propios interesados pueden tener más claro todos los criterios que se tendrán en cuenta. Claridad que sí existe a juicio de todos, pero que Juan Manuel Muñoz coincide con el presidente de la Asociación FPDI al resaltar que lo que más se valora es la investigación, «en detrimento de la docencia«, y que este baremo está más orientado a la contratación de «investigadores con mucho currículum», con menos atención a la experiencia docente que tienen los sustitutos interinos.
«Todo ello teniendo en cuenta que la primera versión de este baremo que conocimos desde PSIUCO de manera indirecta era prohibitiva (refiriéndose a la citada propuesta inicial de Isaac Túnez del 23 de enero), aunque es verdad que la finalmente aprobada ha mejorado», indica el presidente de esta asociación, quien a su vez es delegado sindical de CC.OO. en el comité de empresa del PDI laboral y estuvo presente en aquella reunión con el vicerrector de Personal.
En otras universidades
Con todo, y lógicamente respetando el carácter de concurso público de estas plazas, Muñoz explica que los perfiles que se van a sacar a concurso para cada una de estas plazas «son muy abiertos», en contra de los perfiles que para las plazas de ayudantes doctores han sacado o pretender sacar otras universidades como la de Jaén, Málaga, Cádiz y Sevilla; «universidades que han ‘protegido’ más la posible promoción de su propia plantilla, con lo que nos encontramos con reglas de juego diferentes en distintas universidades públicas andaluzas».
A estas universidades la Junta también les autorizó a principios de curso la contratación de 13, 40, 55 y 41 ayudantes doctor, respectivamente, según datos facilitados por la Secretaría General de Universidades de la Junta.
Tras la previsible aprobación de los perfiles de estas plazas en el Consejo de Gobierno de mañana, las previsiones que maneja la UCO, según fuentes del equipo de Gobierno, son que el proceso formal de la convocatoria y la recepción de solicitudes se extienda aproximadamente un mes, con el objetivo de comenzar a evaluar en abril y mayo, y poder tener adjudicadas las plazas antes de junio. En todo caso, los contratos deben estar formalizados antes del 30 de septiembre.