La Universidad de Málaga se vuelve aún más verde. El Vicerrectorado de Smart Campus y la Delegación de Medio Ambiente de Málaga han unido fuerzas para tratar de frenar al cambio climático y a la emergente contaminación por el alto grado de emisiones de CO2. Esto supone un gran problema para el planeta y para un mantenimiento del aire libre de contaminaciones.
Por este motivo, esta mañana, 9 de enero, ha tenido lugar la replantación de árboles autóctonos y alóctonos, cedidos por la Diputación de Málaga. Ha sido realizado en la parcela situada en la entrada de la Escuela de Ingenierías Industriales, en la Ampliación de Teatinos.
En este acto de replantación, estuvieron como representantes de la actividad el rector de la Universidad de Málaga, José Ángel Narváez Bueno, la Vicerrectora de Smart Campus, Raquel Barco Moreno, y el diputado de la Delegación de Medio Ambiente, Cristóbal Ortega.
Un campus más verde
La ‘arbolada’ ha consistido en la plantación de una decena de árboles como parte del programa ambiental que desarrolla la UMA a través de su Vicerrectorado. La acción no se va a quedar aquí, puesto que se han propuesto plantar un centenar de árboles en diferentes puntos del campus.
El servicio de jardinería ha sido el que ha preparado las diferentes zonas para la plantación. Junto a ellos, un nutrido grupo de voluntarios han podido poner su granito de arena al colaborar en la plantación de las diferentes especies y a crear un campus más verde.
El rector de la UMA ha sido el encargado de dar la bienvenida al acto y dar paso a los discurso de la vicerrectora y del diputado. En palabras de José Ángel Narváez “el conocimiento es fundamental para avanzar”. Por ello ha agradecido el compromiso de la Diputación y demás instituciones, así como la lealtad a la universidad. El rector ha recalcado cómo “los estudiantes son los principales responsables de cambiar el mundo”.
Por su parte, la vicerrectora ha comentado la importancia de una alianza con otras instituciones, como la existente con la Diputación de Málaga. Así ha agradecido la participación de la comunidad universitaria y la representación de estudiantes para la plantación.
El diputado de medio ambiente, Cristóbal Ortega, mantiene altas expectativas con el proyecto ‘Málaga Viva’ y ha definido la importancia de un espacio verde y amplio para los jóvenes. “Somos la primera generación que estamos notando los efectos del cambio climático, pero también la última en poder hacer algo”, ha comentado Ortega, con el fin de motivar a tomar medidas y actuar para dejar el planeta en las mejores condiciones posibles a generaciones futuras.
Los estudiantes, los principales colaboradores
A la primera arbolada han asistido numerosos estudiantes de la Universidad de Málaga de diferentes grados, como voluntarios para la replantación.
Daniel, estudiante de Ingeniería Industrial, le ha parecido una iniciativa muy bonita, ya que el terreno a replantar era uno que se encontraba inutilizado. “Con lo que está ocurriendo ahora en Australia, no está de más poner nuestro grano de arena”, ha comentado el alumno.
Por su parte, María Pichal y María Fernández, estudiantes de Trabajo Social, consideran que la replantación de árboles autóctonos es una iniciativa muy buena y que debe expandirse a más zonas de Málaga, ya que contribuye y compensa el nivel de contaminación en el aire por la gran cantidad de emisiones. “Estaría genial tener más zonas verdes en la Universidad. Aunque, también haría falta hacer algo por la zona del centro de Málaga”, ha remarcar María Pichal.
Los estudiantes no se han atrevido a definirse como expertos en medioambiente, aunque han recalcado su interés por el mismo. Así, los voluntarios y voluntarias muestran su expreso deseo de tener un mayor conocimiento sobre el tema. Lo cual da para reflexionar, ya que si estaban en ese lugar replantando árboles, sí que existe una clara conciencia en ellos. Este es el gran reflejo de la nueva generación que está tomando poder y que pretende conseguir frenar el cambio climático.