El Grupo de Investigación Relaciones Literarias Entre Andalucía y América de la Universidad de Sevilla trabaja en el proyecto de Excelencia de la Junta de Andalucía ‘México 1915-1920: una literatura en la encrucijada’ junto a la UHU.
El lustro de 1915 a 1920 es un momento crucial pero escasamente documentado y analizado dentro de la historia literaria de México. La situación de enfrentamiento bélico tiene como consecuencia la escasez de material, por lo que todo aparentemente se reduce una transición hacia la reconstrucción política y el renacimiento cultural inaugurados en 1920 por la presidencia de Álvaro Obregón y su ministro de Educación José Vasconcelos.
Sin embargo, los integrantes del nuevo proyecto de investigación consideran el período revolucionario una interesante etapa de gran singularidad que guarda claves decisivas para explicar el desarrollo de la literatura mexicana de la primera mitad de siglo XX. :
1915 marcó el momento álgido de la violencia y la inestabilidad política en México, pero también un punto de no retorno en el que la Revolución se consolidó y el sistema cultural tuvo que cambiar irreversiblemente. Durante los cinco años siguientes, en que Carranza ejerció de hombre fuerte y se promulgó la Constitución revolucionaria de 1917, la mayoría de los intelectuales comprendió que no había más opción que adaptarse a las nuevas reglas de juego.
En colaboración con la profesora Rosa García de la Universidad de Huelva y con la Universidad Autónoma de México, el investigador de la US Alfonso García explica que el objetivo del proyecto es reconstruir estos cincos años de la cultura mexicana, cuando se cierra definitivamente la herencia decimonónica representada en lo político por la dictadura de Porfirio Díaz y en lo literario por el modernismo finisecular, y se da paso al nacionalismo y a las corrientes de vanguardia que se afianzarán en los años 20.
Así, la investigación se articula en dos partes: por un lado se está trabajando en las ediciones especiales de dos figuras claves de este período como fueron el poeta Ramón López Velarde, y el narrador Mariano Azuela, los primeros mitos literarios de la Revolución; y por otro, se editará una monografía en la que se reconstruirá e interpretará el campo literario mexicano del momento y se dará cabida a la producción de José Juan Tablada, Alfonso Reyes, Julio Torri, Martín Luis Guzmán, así como a otros autores de la época menos conocidos.