La primera comparecencia de Manuel Castells como ministro de Universidad se ha hecho esperar, pero ha valido la pena. El pasado viernes, el ministro compareció ante la Comisión del Congreso de Diputados para mostrar sus principales líneas de trabajo. «Si no he comunicado antes es porque estamos trabajando», adelantaba Castells, presentando los principales puntos a trabajar por su Ministerio.
Los cinco puntos, presentes en el programa de gobierno de coalición presidido por Pedro Sánchez, han dado pie al desarrollo de la estrategia en educación superior. Así, Castells ha comenzado presentando la revisión del sistema de becas generales para garantizar que estas sean «un derecho subjetivo en función a las rentas familiares». Para ello, desde el Ministerio se trabajará en la simplificación y agilización del procedimiento de concesión de las ayudas. En concreto Castells ha anunciado que «vamos a intentar que la convocatoria se resuelva antes del comienzo de curso y que los estudiantes tengan información fidedigna sobre cómo, cuándo y cuánto se les va a pagar las becas».
Junto a este anuncio, desde el Ministerio de Universidades se ha lanzado el compromiso de aumentar la financiación de las becas con cargo a los presupuestos generales del Estado. Una medida que se desarrollará atendiendo a que estas becas se concedan por razones socioeconómicas, concentrándolas en los niveles del umbral 1 de rentas familiares. Según ha señalado el propio Castells con esta medida se busca que «haya un mayor número de familias en ese nivel con posibilidad de acceso a la universidad».
En cuanto a los estudios de posgrado, desde el Ministerio de Universidad se trabajará en el aumento de becas generales destinadas a los máster profesionalizantes, pues «los estudios de grado se quedan cortos para el empleo y las becas hay que extenderlas», exponía el ministro.
Para que estas medidas tengan una continuidad y sean viables, el Ministerio de Universidades participaré del Observatorio de Becas. Entre los primeros objetivos que se plantean desde el Observatorio se señala la necesidad de incrementar el número de estudiantes procedentes de las zonas rurales, facilitando su movilidad o la posibilidad de acceder a la universidad por vías no presenciales.
El Ministerio eliminará el límite de las tasas universitarias
Cada Comunidad Autónoma tiene la potestad de situar las tasas universitarias en una horquilla de precios. Esta realidad supone una importante diferencia de costes para los estudiantes según donde desarrollen sus carreras, siendo Cataluña una de las zonas donde las tasas universitarias son más caras. Por su contra, Andalucía junto a Galicia se posicionan en las zonas donde las tasas universitarias son más bajas, un hecho que desde el Gobierno central busca equiparar para conseguir la igualdad de todos los estudiantes.
Esta igualdad de acceso a los estudios se planeta a través de la modificación del decreto ley 14/2012, que es el que establece la horquillas de precios. Según ha señalado Castells, el nuevo ejecutivo modificará el decreto ley para «cambiar los criterios de tasas y volver al estado previo a la crisis, eliminando el sistema de horquillas».
La medida propuesta se traduce en un máximo de precio al que podrán estar las tasas, eliminando el mínimo. Así, en todo el territorio español se establecerá un precio máximo de las tasas académicas, posibilitando que el mínimo sea cero, es decir en la línea de los precios establecidos en Andalucía. Esta política económica busca reducir la disparidad entre Comunidades Autónomas.
En este punto, Castells ha hecho hincapié en la necesidad de establecer una contabilidad analítica en las universidades, que sea capaz de señalar el verdadero y objetivo coste cada alumno. Para llevar a cabo esta contabilidad desde el Ministerio ya se está trabajando en conjunto a la Conferencia de Rectores (CRUE), con vistas a unificar los criterios y establecer una medida común que de una visión de la realidad económica.