La Dirección General del Espacio Universitario de la Universidad de Sevilla ha reunido a los jurados que han fallado las propuestas ganadoras de los Concursos de Ideas de Arquitectura de las nuevas facultades de Medicina y Farmacia de la Universidad de Sevilla.
Así, la idea ganadora del concurso para la Facultad de Medicina ha sido la de Pablo Manuel Millán, quien ofrece una “interesante solución” a la permeabilidad de la manzana eligiendo dos cotas de referencia que permiten la construcción de dos estratos, en los cuales se resuelven en sección las distintas circulaciones, generando espacios vacíos tanto de carácter público como universitario.
El jurado de la institución hispalense ha valorado que aparentemente parece tratarse de un proyecto excavado, “pero realmente es el resultado de la elección de esas referencias que se resuelven en una sección limpia”. De este modo, el proyecto ganador consigue aliviar la densidad que actualmente padece la Facultad de Medicina desde una estrategia que “abre un campo de posibilidades en su aplicabilidad futura”. Estrategia que atiende de una manera singular a la trama y memoria del Hospital de las 5 Llagas.
Por otro lado, el segundo premio se le ha otorgado a Francisco Javier Terrados Cepeda, cuya propuesta es de carácter sostenible desde los puntos de vista ambiental y social, lo que “otorga gran calidad a los espacios colectivos universitarios”, gracias a la incorporación de dos grandes espacios aprendidos de la referencia del Hospital de las 5 Llagas. De una manera radical resuelve la conectividad transversal de la manzana a través de una calle claramente formalizada. Supone una propuesta “medida y coherente con sobrada solvencia técnica”. :
En cuanto al tercer premio del Concurso de Ideas para la nueva Facultad de Medicina, desde la US señalan que ha quedado desierto.
Ideas para la Facultad de Farmacia
Por su parte, el proyecto ganador para la nueva Facultad de Farmacia es el que ha presentado Morales de Giles Arquitectos. Se trata de una propuesta que atiende a la preexistencia del proyecto original del centro con el máximo de su reutilización y recuperación. En ella se valora la implantación y el desarrollo de calidad que hace de los espacios, con especial énfasis en el valor espacial de la planta baja donde se concentran los usos colectivos. La estructura espacial de las plantas “pone en valor los espacios de comunicación” como centros de actividad que aseguran la relación entre los miembros de la comunidad universitaria, que se abren al exterior en todos sus extremos “elevándolos a la condición de espacios referenciales dentro del edificio”.
El segundo premio del Concurso de Ideas para la nueva Facultad de Farmacia ha sido para José Antonio Carbajal Navarro. En este caso, se trata de un proyecto que nace de una estrategia previa basada en la fragmentación articulando con éxito la preexistencia del edificio original. Esta fragmentación “asegura la aplicabilidad controlada en las fases sucesivas, consiguiendo a su vez una mínima ocupación del solar”, lo que determina la permeabilidad, en el plano de acceso; esta cuestión es posible gracias a un desarrollo de la planta sótano a través de espacios de ventilación e iluminación hundidos.
Por último, José Ignacio Sánchez-Cid Endériz ha conseguido el tercer premio. Su proyecto articula diversas escalas para resolver el programa de usos en “una composición volumétrica claramente vinculada al Puerto de Sevilla”. Propone una planta sótano de aparcamiento que determina la merma de la puesta en valor del espacio transversal existente junto al Colegio Mayor Hernando Colón.
Concurso para remodelar las facultades de Medicina y Farmacia
La Universidad de Sevilla lanzó a principios de año sendos concursos de ideas con el fin de disponer de un abanico de reflexiones y propuestas que, a través del ejercicio de una arquitectura de calidad, resuelvan los conflictos funcionales que se han ido generando y den respuesta a la demanda de espacios destinados a la actividad docente e investigadora que merecen las facultades de Farmacia y Medicina.
Los proyectos debían cuidar la integración de los centros en el contexto urbano donde se ubican. En ambos casos la solución propuesta podría plantear fases sucesivas de ejecución, de forma que la afección a la actividad del centro sea mínima.
Los jurados de ambos concursos han estado presididos por el director general del Espacio Universitario de la US, Francisco Montero Fernández, catedrático de Proyectos Arquitectónicos de la ETS Arquitectura de la Universidad de Sevilla. Cada jurado ha estado formado, junto al presidente, por cuatro vocales, todos ellos catedráticos del Área de Conocimiento de Proyectos Arquitectónicos de distintas ETSA españolas.