La primera experiencia inmersiva de realidad virtual del Museo Nacional del Prado estará disponible en el Polo Digital de Málaga en «La Noche en Blanco». Se trata de una experiencia 360º innovadora, que cuenta con la última tecnología y sonido binaural. Cuatro empresas alojadas en el Polo Nacional de Contenidos Digitales: Mecenas 2.0, Feeel, 3intech y Krill Audio han dado vida a este proyecto, y han trabajado en colaboración con el departamento de Educación y Área de Desarrollo Digital del Museo de Prado y el comisario de la exposición Pedro J. Martínez Plaza.
Respecto al proyecto, Marta Tabernero, responsable del proyecto de la empresa Mecenas 2.0 comenta que “con esta experiencia 360º podemos sumergirnos en el Prado, descubriendo época a época viajando en el tiempo. Estamos haciendo lo que siempre se ha hecho en el cine, utilizar la creatividad y la emoción, nos hemos llevado a la ficción un contenido didáctico para hacerlo más atractivo. Es un trabajo de traducción de un espacio cultural a un lenguaje contemporáneo con el objeto de acercarlo a nuevos públicos, realizado con la máxima accesibilidad que permite la tecnología en la actualidad, sin necesidad de bajarse ninguna aplicación”.
Por su parte, este proyecto ha supuesto un gran reto a nivel tecnológico para la empresa 3intech que ha trabajado con tecnología webXR, la cual está en pleno desarrollo. El audio interactivo también juega un papel fundamental en esta experiencia, y según Felipe Milano, de Krill Audio, “guiamos al usuario consiguiendo una sensación de inmersión en el espacio virtual”.
Un viaje en el tiempo por cuatro épocas notorias
La sala 39 del Museo del Prado ha sufrido diferentes reconstrucciones. Los usuarios a través de sus móviles podrán viajar en el tiempo en cuatro épocas notorias – años 1828, 1867, 1936 y 2019 – que tienen que ver con momentos históricos y representativos de la historia de España y del Museo.
Se han recreado con el máximo detalle: los cambios estructurales de la bóveda, las obras expuestas en cada época con sus maravillosos enmarcados, los diferentes suelos, la pintura de sus paredes, la iluminación, el mobiliario, las alfombras, el retrete de Alfonso VII e incluso se han realizado documentos originales de los archivos del Museo del Prado.