El segundo día de campaña en la Universidad de Málaga (UMA), ha llevado al candidato José Ángel Narváez, actual rector en funciones, a recorrer las Facultades de Ciencias de la Educación, Psicología, Medicina y Ciencias de la Salud, además del aulario Rosa de Gálvez, donde ha desvelado en la jornada electoral de hoy uno de los nombres que conformarían el futuro gobierno de la UMA, en concreto el de la persona que se encargaría del nuevo Vicerrectorado de Internacionalización (que sustituiría al actual de Relaciones Internacionales). Ésta sería Susana Cabrera, actual directora del Secretariado de Movilidad Estudiantil.
Con esta apretada agenda, el candidato a ocupar el Rectorado los próximos cuatro años, ha presentado su programa en reuniones tanto con el personal de administración y servicios (PAS), como con el docente e investigador (PDI), a las que también han asistido algunos alumnos. Su jornada arrancó sobre las 9.00 horas en el salón de actos de Psicología y Ciencias de la Educación, donde ha estado acompañado por el decano de este último centro, Francisco Murillo, quien también forma parte de su equipo. Después visitó la Facultad de Medicina, donde también ha estado presente el decano, Pablo Lara, que integra su candidatura.
En cada uno de estos escenarios, el candidato ha explicado cuáles son sus propuestas para, en líneas generales, mejorar la ordenación de la docencia, las condiciones laborales del PAS y PDI, para lograr un gobierno más “transparente, eficaz y participativo” y reforzar el posicionamiento de la UMA en el plano internacional.
“Lo que nos diferencia de los rivales es que nosotros lo sabemos hacer”, ha respondido Narváez a la pregunta de un profesor que señalaba que “todos los candidatos dicen que van a hacer más o menos lo mismo”. Así, el actual rector en funciones ha explicado que su programa está basado en la experiencia y en un “análisis crítico” de la realidad de la Universidad. “Ahora mismo hay pocas personas en la UMA que conozcan esta institución como yo”, ha afirmado.
Se trata, según ha dicho, de “un proyecto a medio y largo plazo” que persigue “cambios importantes en la cultura de trabajo y de gobierno”. Este cambio de cultura, que en palabras del propio Narváez, “no se va a conseguir en cuatro años”, requiere “un sistema de gobierno diferente”, que dé lugar a “una UMA más transparente y participativa”.
En este punto, con relación a la transparencia, ha insistido en que ésta tiene que ser “no solo en lo económico, sino también en los procesos”. “Que todo el mundo sepa qué se hace, para qué se hace y por qué se hace”, ha manifestado. En el plano de la participación, ha afirmado que su intención es crear foros para mantener un contacto directo con los distintos colectivos, de manera que, además, estas mesas de trabajo queden “institucionalizadas”.
“Desvincular la gestión de la política”
Durante su visita al aulario Rosa de Gálvez, ha destacado que hay que luchar por “romper la brecha entre el PAS y el PDI”, porque “para mí el personal de administración y servicios también es comunidad educativa”. Del mismo modo, ha abogado por profesionalizar al PAS, de manera que se conviertan en “los gestores” de la Universidad.
“Se trata de desvincular la gestión de la política”, ha comentado Narváez a uno de los trabajadores del aulario, al tiempo que ha asegurado que “no quiero ningún servicio dependiendo directamente de ningún vicerrector”.
“Es demencial que la estructura de una institución pública tenga que cambiar porque haya un cambio en la estructura política”, ha dicho.
Ha reiterado su intención de elaborar una Relación de Puestos de Trabajo (RPT) “nueva y por áreas, que no sea una mera relación de puestos de trabajo, sino que recoja las capacidades, características y cualidades” de cada uno. “No quiero más parches en la RPT, quiero una nueva”, ha insistido, subrayando su compromiso de hacerla de forma “absolutamente transparente y con la participación de todos”.
Internacionalización
Uno de los puntos estratégicos desarrollados en el programa electoral de Narváez es el referido a la estrategia de internacionalización, dentro de la cual está la creación de un nuevo vicerrectorado específico. Según ha expresado, la Universidad de Málaga tiene que analizar qué papel juega fuera de las fronteras y apostar por un cambio en la filosofía y el concepto de internacionalización para potenciar su posicionamiento.
En este ámbito, además de reforzar los programas de movilidad y de que estos lleguen a todos los colectivos de la comunidad universitaria, una de sus propuestas es la implantación de grados conjuntos con universidades extranjeras.
Por otra parte, se ha mostrado partidario de modificar el calendario académico, aunque ha incidido en que cualquier cambio irá precedido de un acuerdo con los estudiantes, el PAS y el PDI. “Yo soy partidario de cambiarlo, creo que por muchas reticencias que tengan los estudiantes, es mucho más rentable para ellos”, ha subrayado, agregando que desde el punto de vista de la organización de la propia institución “es mucho más fácil”.
Al ser cuestionado acerca de la externacionalización de servicios de la Universidad. Narváez ha afirmado que no va a seguir con la política de externacionalización, pero ha indicado que “tampoco vamos a recuperar esos servicios porque no tenemos recursos para ello”. “Lo que sí quiero hacer es mejorar la relación con esas empresas y exigirles que presten un servicio de mayor calidad y más acorde a la realidad de una universidad”, ha añadido.
Facultad de Ciencias de la Salud
Narváez ha terminado su ronda de visitas en Ciencias de la Salud, situada en la ampliación del campus de Teatinos. Allí, el candidato ha escuchado las demandas del centro, en boca de la decana, María Teresa Labajos, quien ha hecho hincapié en las particularidades y los problemas de la Facultad.
Labajos, que ha arrancado a Narváez el compromiso de reforzar la plantilla de profesores de Ciencias de la Salud si llega a ser rector, también ha reclamado, entre otras muchas cosas, una mejora del entorno del edificio que ocupa la Facultad, y de las conexiones del transporte público (metro y autobús de la EMT).
Narváez, quien fue director de la antigua Escuela de Enfermería, ha asegurado que conoce a fondo las particularidades del Centro, y ha reconocido que “ha habido errores en la gestión”, pero que la situación “es reversible”. “Lo malo de hacer las cosas mal, no es hacerlas mal, es no arreglarlas”, ha dicho. Así, en su discurso ha apuntado la idea de que “no todos somos iguales”, para hacer referencia a que “cada centro tiene sus particularidades y necesidades específicas”, lo que considera “una de las fortalezas de la UMA”.