Cuando los estudiantes llegan a la parte final de sus estudios y comienzan a hacer prácticas en una empresa suponen ese último eslabón de la larga cadena corporativa. No en todo los casos, pero sí en muchos de ellos, apenas tienen casi derechos y casi ni se les tiene en cuentas. Pero esta situación están destinada a cambiar con el nuevo Estatuto del Becario, una normativa que el Gobierno de España quiere poner en marcha antes de que acabe este año. Hace meses se alcanzó un acuerdo con los sindicatos sobre un texto que, finalmente, no llegó a entrar en vigor ante el descontento general, pero que servirá de base para la nueva norma. Entre otros puntos, fijaba límites al número de horas.
Para entrar en materia, es preciso matizar que hay dos tipos de becas que los estudiantes deben conocer: las curriculares -que forman parte del plan de estudios y son las que regulará este Estatuto- y las extracurriculares que son voluntarias, no están dentro de un plan de estudios y son las que esta normativa pretende suprimir para evitar cierto abusos que se han ido produciendo en este tiempo. Os contamos algunas de las ventajas que contempla el Estatuto del becario.
Qué derechos tendrás con el nuevo Estatuto del becario
Un número de horas máximo
El Ejecutivo ya intentó poner en marcha esta normativa hace años y, de hecho, había llegado a un acuerdo con los sindicatos por el que se limitaría en 480 horas el tiempo que puede hacer cada becario por curso. A cuatro horas diarias, supone un máximo de 120 días. Un paso importante para evitar que las empresas utilicen sistemáticamente a los becarios para cubrir puestos de trabajo.
Límites al número de aprendices
La normativa que se diseñó entonces para el Estatuto del becario y que servirá de base para la que se tramite ahora también establece un máximo para el porcentaje de la parte de la plantilla que puede estar en prácticas al mismo tiempo, que es del 20%. No obstante, el borrador de la norma permitía a la empresa contar con dos becarios en plantilla independientemente de su tamaño.
Compensación por los gastos
Un punto central de este nuevo Estatuto del becario es que busca evitar que los estudiantes en prácticas acaben pagando dinero por trabajar. Aunque es cierto que, en principio, las empresas no estarán obligadas a remunerarles, sí estarán obligadas a costear los gastos de desplazamiento, alojamiento y manutención para estas personas, según corresponda, según exponen desde UGT.