Máquinas de escribir, computadoras, celulares, tabletas… en todos los casos se sigue el clásico modelo de teclado actual, pero hace unos años esto no era así. Antiguamente, las teclas estaban dispuestas en orden alfabético pero, ¿a qué se debe este cambio?
Los primeros teclados fueron los de las máquinas de escribir en el siglo XIX y sus teclas estaban agrupadas de forma alfabética. Esto hacía difícil la tarea de escribir rápido, ya que tenían en ese momento una barra de metal con la imagen de una letra que golpeaba el papel a la hora de escribir. Al digitar muy rápido, las barras se enredaban y se generaban manchones en el papel.
Fue por esta razón por la que las teclas fueron colocadas aleatoriamente formando el conocido teclado QWERTY (puedes comprobar que en tu teclado las teclas que están debajo de la filas de los números van desde la letra ‘Q’ hasta la ‘Y’. El orden de las letras fue hecho con mucho tiempo de estudio y pruebas por su inventor Christopher Sholes en 1868. Esta técnica permite que cuatro dedos de cada mano se colocan sobre la fila central de teclas. Para poder encontrar esta posición sin tener que mirar el teclado, las teclas correspondientes a los dedos índice de cada mano (F y J) tienen un rasgo distintivo al tacto que el resto de las teclas.
El teclado QWERTY está diseñado para el idioma inglés principalmente. Si te fijas en la primera fila de letras, fue diseñada para que se pudiera escribir rápidamente todas las letras de la palabra ‘typewriter’, que significa máquina de escribir en inglés. Hay miles de palabras en inglés que pueden ser escritas sólo con una mano, favoreciendo principalmente a los diestros, ya que más palabras se pueden formar con las teclas del costado izquierdo del teclado, dejando la mano derecha libre para utilizar el ratón.
El teclado tiene versiones para diferentes lenguas. Hay países, como Alemania, que intercambian la tecla ‘Y’ y la tecla ‘Z’, con lo que se convierte en teclado QWERTZ. En Francia y Bélgica hay más cambios y las primeras 6 teclas alfabéticas tienen la secuencia AZERTY. En la disposición española e hispanoamericana se incluye la letra ‘Ñ’. Destaca también el teclado HCESAR, que permitía una redacción dactilográfica más rápida en portugués en los años 40. En la actualidad los portugueses utilizan un teclado como el nuestro. Las máquinas HCESAR se han convertido en curiosas y buscadas piezas de coleccionista.
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