La Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad ha alcanzado ha consolidado un acuerdo con el operador Vodafone mediante el cual se facilitarán un total de 1.000 tarjetas SIM a las universidades andaluzas. El objetivo es que estas tarjetas contribuyan a facilitar la conexión a internet a estudiantes universitarios becados que tienen dificultades de acceso a Internet. Las tarjetas cuentan con una capacidad de 60 gigabytes al mes durante un periodo de dos meses, con el objeto de que este alumnado pueda participar en los procesos de docencia y evaluación online durante lo que queda de curso académico.
Las tarjetas SIM han sido distribuidas entre las universidades de Almería, Cádiz, Córdoba, Huelva, Granada, Jaén, Málaga, Sevilla y Pablo de Olavide en proporción al número de estudiantes con beca del Ministerio y atendiendo al nivel de renta familiar del estudiantado. De manera que la UGR recibirá 233 tarjetas, la US obtendrá 213, la UMA 169, la UCA 111, la UCO 70, la UJA 63, la UAL 52, la UPO 45 y la UHU 42. Esta medida se ha consolidado unos días después de que las universidades andaluzas anunciaran el mantenimiento de la docencia online hasta la finalización del presente curso académico debido a la pandemia del COVID-19.
Con esta acción la Consejería y Vodafone aspiran a que ningún estudiante se vea excluido de la modalidad de enseñanza no presencial, así como de la evaluación online y demás procesos universitarios (prácticas, TFG y TFM, entre otros) por falta de recursos tecnológicos u otras circunstancias que obstaculicen el acceso a internet. Esta iniciativa no tendrá coste ni para las universidades ni para los alumnos, ya que se incluye dentro del programa de Bono Social con el que Vodafone ayuda a colectivos en riesgo de brecha digital. Las universidades, que actualmente están trabajando en la detección de alumnos que precisan estos dispositivos, serán las encargadas de distribuir las tarjetas.
Por otra parte, esta Consejería junto con el Sistema Andaluz de Universidades y la Dirección de Evaluación y Acreditación (órgano externo de evaluación de las universidades andaluzas) han elaborado un marco de principios destinado a mantener la cohesión, solidez y calidad del sistema académico durante el presente curso. Dicho convenio persigue el objetivo de velar para que todos los estudiantes puedan continuar con la formación a distancia y concluir el curso, y generar los mecanismos y acciones necesarias para ellos. Las autoridades competentes han determinado, a través de este acuerdo, que “es un objetivo del proceso de adaptación que el estudiantado pueda cursar las asignaturas en la que está matriculado y ser evaluado en las fechas previstas en el calendario académico, sin sufrir retrasos en la terminación del presente curso académico o tener que trasladar las asignaturas al próximo curso”. En teste sentido, y una vez alcanzado este acuerdo, cada universidad aprobará sus criterios académicos de adaptación válidos para todas las titulaciones y elaborará adendas a las Guías Docentes con las adaptaciones que se acuerden