La Universidad de Málaga ha iniciado este viernes 23 de septiembre el nuevo curso tras un acto de apertura deslucido pero directo en sus discursos. La novedad de este año ha sido el traslado del evento al Salón de Actos de la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Industriales (ETSII), surgida tras la unión de la Escuelas de Ingeniería Industrial y la Politécnica. Este nuevo espacio ha eliminado la tradicional vistosidad que caracteriza el acto, pues la comitiva de doctores y cargos académicos no ha tenido la visibilidad ni la espectacularidad que suele acompañarla.
El Salón de Actos de Ingenieros, aunque de menor tamaño que el Paraninfo universitario, no completó su aforo, dejando a la vista muchos asientos sin ocupar. También destacó la ausencia de los rectores andaluces, que tradicionalmente acompañan a sus homólogos en cada acto de inauguración. Mientras que el pasado curso la apertura de curso malagueña contó con la presencia de Miguel Ángel Castro, rector de la Universidad de Sevilla, este año Narváez solo ha contado con la presencia de tres vicerrectores de la US.
A las 11.30 el consejero de Economía y Conocimiento hizo su aparición en la Sala de Estudio de la ETSII junto al rector para atender a los medios. Las primeras palabras del consejero fueron de felicitación para el rector malagueño, incidiendo en que este este es el primer acto de apertura del Narváez como rector de la UMA de forma oficial, pues aunque el anterior curso también encabezó el evento lo hizo como rector en funciones. Antonio Ramírez Arellano dio un adelanto del que sería su discurso de inauguración, donde planteó el objetivo de la Junta de Andalucía de “continuar con un sistema universitario público en el que las personas sean el centro de atención”, siendo la implementación de la LOMCE tema clave por la incertidumbre generada en la comunidad educativa. En esta línea Ramírez de Arellano recalcó el trabajo conjunto de las universidades y la Junta para unificar los criterios de admisión a través del Distrito Único Andaluz. También subrayó, de igual manera que en el pasado Consejo de Gobierno hiciera la presidente Susana Díaz, que
“mientras que el Gobierno de España no cierre el proceso normativo, que debiera dar la seguridad jurídica necesaria para hacer otro tipo de prueba, en Andalucía se seguirá haciendo la prueba de acceso a la universidad en unos términos muy similares a los actuales”.
La lectura de la Memoria Académica corrió, tal y como marca el protocolo, a cargo del secretario General de la Universidad, Miguel Porras. Con un tono veloz y conciso, Porras enumeró los principales hechos acaecidos durante el curso 2015-2016. El dato más destacado del desglose de cifras fue la cantidad cuatro millones de euros en beneficio de la Universidad de Málaga a través de los títulos propios de posgrados. El presupuesto total con el que contó la UMA durante el curso pasado fue de 249 millones de euros, unos 23.5 millones más que en el ejercicio anterior. Ante los derechos perdidos, la UMA ha subrayado en su Memoria la recuperación del 75% de la paga extraordinaria, suprimida en el año 2012.
El catedrático de Comunicación, José Antonio García Galindo ha sido el responsable de la Lección Inaugural de este año. Bajo el título “Periodismo e intelectuales en el tránsito de la sociedad de masas a la sociedad de la información” García Galindo hizo un repaso a la historia del periodismo en el siglo XX y la importancia del mismo como creador de la Opinión Pública. Con un pormenorizado análisis de la importancia de la posesión de los medios de comunicación en la sociedad Galindo expuso la importancia de la relación entre Universidad y Periodismo, así como el estudio de las estructuras de la comunicación desde un punto de vista académico.
La elección de García Galindo como docente e investigador que ofrece la primera lección magistral del curso responde al protocolo universitario, que asigna este reconocimiento al catedrático más antiguo de la Facultad elegida para dar la ponencia. En palabras de Galindo “para mí era un orgullo representar a la facultad y a los estudios de comunicación en este acto y con la lección inaugural. Y volver a hablar de periodismo que era lo que a mí me parecía importante, sobre todo que tenemos que sentirnos muy orgullosos de nuestros estudios universitarios”. Hace ya 21 años que un docente del área de la comunicación, el profesor Bernardo Díaz Nosty, quien impartiera esta lección inaugural, cuando la facultad contaba con unos escasos cuatro años de recorrido.
En declaraciones posteriores, José Antonio García Galindo recalcó la importancia de que:
“la formación que se recibe en la universidad, aunque no sea la única que luego un profesional vaya a recibir a lo largo de su carrera, es fundamental para dignificar la profesión”
subrayando así mismo cómo “las profesiones existen porque tienen estudios detrás, hay un corpus de estudios académicos, sino estaríamos hablando de otra cosa, un oficio. Yo considero que hay una parte de técnica y de oficio dentro de la profesión”.
“España es el único país en el que se habla mal de sus Universidades Públicas”
En su turno de intervención, Ramírez de Arellano volvió a destacar el trabajo que la Junta de Andalucía realiza para asegurar la igualdad de oportunidades a la hora de acceder a los estudios superiores. Así, el consejero de Economía y Conocimiento subrayó que “es el estudiante quien elige la universidad a través de sus méritos” en contra del sistema propuesto por el Gobierno central. Entre las propuestas para el nuevo curso, Ramírez de Arellano presentó la reactivación del PAIDI junto al necesario cierre del ejercicio anterior y con la promesa de movilizar en seis meses los 660 millones de euros del programa.
“no se puede quitar los impuestos de sucesión y subir las tasas, pues este último es un impuesto que se les cobra a los jóvenes”.
El consejero expuso ante el público la falta de denfensa de la educación pública en el país, señalando que “España es el único país en el que se habla mal de sus Universidades Públicas”, lo que afectaría de lleno a la visión internacional de los egresados. Para finalizar su discurso, Antonio Ramírez de Arellano recalcó la apuesta que la Junta de Andalucía hace por sus Universidades Públicas a través de la propia creación de la Consejería de Economía y Conocimiento e informando, el pasado 21 de septiembre, ante el Parlamento de Andalucía de la apertura del nuevo curso universitario, con el objeto de situar la universidad en el foco de la región.
Sobre este discurso, Francisco Javier Conejo, secretario político institucional del PSOE de Andalucía, destacó que “el consejero ha mostrado el compromiso del Gobierno andaluz con las universidades, estableciendo claramente los retos de las universidades públicas en los próximos años”, siendo clave su “compromiso por garantizar la financiación para tener los recursos suficientes” y el compromiso, indispensable para los estudiantes, de “seguir congelando las tasas universitarias, garantizando la igualdad de oportunidades en el acceso a los estudios”. Sobre la referencia a los que «hablan mal» de la educación pública Conejo fue más específico, señalando a «algunos miembros del Partido Popular» que mostrarían más interés en las instituciones privadas que en las públicas.
“Siempre digo que invertir en educación y en investigación es invertir en futuro, y les recuerdo que ni siquiera nos acercamos a la media europea en este aspecto”
José Ángel Narváez no decepcionó en su primer discurso como rector oficial d la Universidad de Málaga. Con un tono directo se dirigió al consejero de Economía y Conocimiento para recordarle la necesidad de disponer de un modelo de financiación universitario “que nos dé certidumbre sobre el futuro, que garantice la autonomía universitaria y que sea, además, el reflejo de una estrategia política de las universidades”.
“la receta puede ser sencilla, simplemente articular el discurso político con los hechos”.
Ante el PAIDI, citado anteriormente con orgullo por Ramírez de Arellano, José Ángel Narváez no se mostró tan complaciente, subrayando que “me temo que a estas alturas difícilmente se podrán ejecutar los 172 millones de euros comprometidos para este año”.
La situación económica general de la educación española, y andaluza, llevó a rector malagueño a afirmar que “es una auténtica heroicidad que la Universidad de Málaga esté entre las 750 mejores universidades del mundo en el ranking de Shangai”, recalcando así las malas condiciones que afectan de lleno al sector educativo. Finalmente, José Ángel Narváez realizó un ejercicio de autocrítica y planteó como objetivos para el nuevo curso:
“trabajar para ser más eficientes, más eficaces y más transparentes”.
Ante la realidad política y económica del sector educativo en Andalucía, Carolina España, diputada del PP por Málaga manifestó una vez concluido el acto y sobre las palabras del consejero y del rector que “la Universidad es referente social, cultural y de progreso para Málaga, lo ha sido a lo largo de su historia y lo será en el futuro. Pero desear una Universidad mejor, con más recursos y mayor capacidad de generar conocimiento y desarrollo no es incompatible con resaltar lo que no se hace bien y debe mejorar. El propio rector ha puesto sobre la mesa la preocupante situación por la que atraviesa el futuro de su financiación, a lo que habría que sumar la deuda que arrastra la Junta con las Universidades. Apostar por la Universidad pública no debe quedarse en un discurso más o menos bonito, debe traducirse en hechos”.
El final del evento volvió a deslucirse por la rapidez en la que todas las autoridades desaparecieron de las instalaciones de la ETSII, en contraposición a la tradicional salida del Paraninfo donde de forma distendida los cargos suelen intercambiar sus impresiones.