Un millar de jóvenes de más de 40 centros escolares de la provincia de Málaga participan este año en el programa de prevención del consumo de drogas que organiza la asociación Proyecto Hombre bajo el nombre ‘Entre Todos’ y que está dirigida a adolescentes y preadolescentes. Un año más la Fundación Bancaria Unicaja colabora en este proyecto mediante una aportación económica.
El programa de prevención de consumo de drogas ‘Entre todos’, desarrollado desde 2001, consiste en programas educativos que, a través de charlas y actividades diversas, buscan la concienciación y la prevención universal, escolar y familiar, así como fortalecer la personalidad de los jóvenes malagueños y posibilitar su desarrollo saludable.
Se dirige a una población escolar específica (alumnado de quinto y sexto curso de Primaria, y de los cuatro cursos de Secundaria), se desarrolla en la hora de acción tutorial y está llevado a cabo por el profesorado que, previamente, se ha formado para implementar el programa en el aula.
El acuerdo de colaboración fue suscrito por la directora General de la Fundación Bancaria Unicaja, Dolores Cano, y por el vicepresidente del Centro Español de Solidaridad de Málaga-Proyecto Hombre Málaga, Juan Serrano. El respaldo de Unicaja a la asociación se prolonga durante más de diez años, según ha recordado Unicaja en un comunicado, y se enmarca en el interés de la Fundación Bancaria por apoyar actuaciones de asistencia social, especialmente aquellas dirigidas a los menores y a los jóvenes destinadas a transmitirles hábitos de vida saludables. :
Pilares para la prevención del consumo de drogas
Mediante esta iniciativa se pretende dar respuesta a los tres pilares que se consideran los cimientos de la formación de los menores para la prevención del consumo de drogas. Estos son: saber (informando sobre las drogas), querer (reflexionando sobre actitudes, valores y motivaciones) y poder (trabajando la autoestima, las habilidades sociales y la toma de decisiones).
Entre los objetivos del programa cabe destacar el de favorecer el desarrollo del pensamiento crítico y la toma de decisiones, incrementar las habilidades sociales y de comunicación, mejorar otras capacidades para la vida y aprender estrategias de resolución de conflictos. Además de estos, la iniciativa también persigue evitar el inicio del consumo de drogas o retrasar la edad en el mismo, reducir o anular el consumo de sustancias legales en el alumnado ya iniciado, y favorecer una actitud crítica y asertiva frente a las drogas.
Complementariamente a esto, se incluye un programa familiar en el que se proponen actividades que padres e hijos realizarán en casa. Este trabajo estará supervisado posteriormente en sesiones que se realizan en el centro escolar con toda la familia, y que serán tanto conjuntas (los progenitores y los hijos) como solo para los adultos. En este caso el objetivo es que la familia sea agente preventivo para el menor.
Durante el pasado curso 2014/15, algo más de 9.700 jóvenes y 400 profesores participaron en este programa, pertenecientes a 40 centros educativos. Este nuevo curso escolar se incorporarán nuevos centros, por lo que las previsiones son de crecimiento continuado de la participación en el programa.