
Universidad Pública, Sí
Las últimas semanas se han visto copadas de informaciones referidas al ya denominado “máster de Cifuentes”, una retahíla de datos que afectaban de lleno no solo a la supuesta alumna, sino sobre todo a la Universidad Rey Juan Carlos.
Los medios de comunicación, afines y no afines al partido de Cifuentes, seguirán sacando noticias hasta que esta dimita. Quien crea que los hechos de los que se le acusan pueden ser el día a día de la Educación Superior no conoce la universidad, y sobre todo no sabe que esta está compuesta por miles de personas, no solo una pequeña cúpula. Hablar mal de una institución como la URJC es hablar mal de todas las personas que la componen y, como siempre, pagan justos por pecadores. La Universidad Pública española goza de relativa buena salud, aunque aqueja un problema crónico de mala financiación. Si ante la sociedad solo hablamos de los casos de corrupción se crea una imagen de la universidad que no es, potenciando la falta de prestigio de la Educación Pública. Por ello, hay que defender a la universidad en la bueno y en lo malo, pillando al mal gestor y a la política fullera, sin olvidar que ellos solos no la conforman.
Por Miguel Gaona
Director de Aula Magna