La VIII edición del Festival de las Artes Contemporáneas ya está en marcha. Este lunes ha quedado inaugurado en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Granada este evento multidisciplinar con motivo del patrón del centro, Alonso Cano. Al acto han asistido el vicerrector de Extensión Universitaria, Víctor Medina; el vicerrector de Investigación y Transferencia, Enrique Herrera, y el decano de Bellas Artes, Francisco José Sánchez Montalbán.
El arte experimental vinculado a la creación contemporánea de estudiantes y egresados de Bellas Artes tiene como eje central la exposición ‘El proceso’, una muestra con obras de casi una treintena de artistas. Algunos de ellos, como David Escalona, Cristina Ramírez o María Dávila, ya integrados en los circuitos profesionales. Sus trabajos se podrán disfrutar hasta el día 8 de abril.
Marisa Mancilla, vicedecana de Extensión Cultural y Transferencia y una de las comisarias de la exposición, ha detallado a Aula Magna que este festival ha pasado de ser “una especie de pequeña feria que era un experimento doméstico aquí para que los alumnos tuvieran contacto con la organización” a un conglomerado multidisciplinar. “Todo lo que montamos previamente tiene una fase de preparación con profesionales del sector”, detalla, “después tendrá una fase de evaluación y posible publicación”.
De este modo, estudiantes y egresados viven de cerca el proceso —de ahí el nombre de la muestra— de gestación de un festival artístico. En paralelo a la inauguración, la Editorial de la Universidad de Granada ha presentado un libro en el que se dan cita textos e imágenes de los artistas participantes en los que analizan los procesos de creación. :
‘El proceso’ es solo una de las actividades del evento “más magno de la Facultad”, como lo define Mancilla. Jornadas de empleabilidad en el sector del arte, conferencias, una mesa redonda sobre el trigésimo aniversario de la Facultad o un festival de música experimental forman parte de una oferta que se extenderá durante tres días. “Nosotros queríamos ver que las cosas no son un evento, sino un proceso, y toda nuestra idea funciona así”, ha explicado Marisa Mancilla.
La “emergencia”, una etapa que se estima en diez años, tal y como ha afirmado la vicedecana, es un periodo “muy peligroso, una zona de venenos y peligros” en la que se ven integrados los recién egresados. Es por ello que la Facultad de Bellas Artes ha querido con FACBA “mantener y extender sus tentáculos” para conectar a quienes se están formando y a los que ya han dado los primeros pasos en su carrera profesional.
En una convocatoria pública se han seleccionado los siete trabajos de estudiantes de Bellas Artes en la actualidad. “La idea es que venga gente de fuera a trabajar aquí y los que tenemos aquí que salgan fuera”. De este modo, Bellas Artes no queda “como una Facultad cerrada dentro del entorno universitario” sino que se implica en el entorno cultural.